Mucho espacio para crecer

    La Cámara de Comercio Argentino-Holandesa fue fundada en 1919, lo que refleja acabadamente la antigüedad del proceso inmigratorio de productores e industriales holandeses a la Argentina y la importancia del comercio bilateral. Los socios son algo más de 120, muchos de ellos empresas argentinas, que no sólo comercian con Holanda en sentido estricto sino con otras naciones de

    Europa a través de una de sus entradas principales: el puerto de Rotterdam.

    “La función de la cámara”, enfatiza Martín Mayer-Wolf, su presidente, “es actuar como foro donde se reúnen las principales empresas holandesas y aquellas que tienen intereses con agentes económicos holandeses para discutir temas de interés general sobre inversiones holandesas en Argentina, normas comerciales en ambos países, eventos políticos tales como la visita del presidente Menem a Holanda el año pasado, y visitas de delegaciones comerciales de Holanda a la Argentina. También tiene la misión de analizar de qué forma se puede mejorar la relación comercial entre ambos países”.

    “La Cámara es el canal de comunicación para llegar a ambos mercados. Se trata de una entidad profesional, con una muy importante base de datos que consta de unas 80.000 compañías y permite a cualquier empresario de la Argentina informarse sobre oportunidades y direcciones en Holanda y

    viceversa.”

    “Holanda es un socio natural para los negocios de exportación de la Argentina a Europa”, sostiene Pedro Gebhardt, director gerente de la Cámara. “El hombre de negocios holandés es muy directo y casi no existen trabas burocráticas. Creemos que una buena base de crecimiento de las exportaciones

    argentinas radica en afianzar sus lazos comerciales con Holanda. No es la única pero, mirando a Europa, es una de las más importantes”.

    La relación económica entre los dos países, en términos de balanza de pagos, es hoy favorable a la Argentina, que exporta a los Países Bajos cinco veces más que lo que importa. Los rubros en los que Holanda tiene más demanda de productos argentinos son alimentos y animales vivos, tabaco, cuero, oleaginosas, madera, carnes y algodón, todos productos primarios y agroindustriales.

    “Vemos la relación entre ambos países -dice Meyer-Wolf- como muy fuerte y de sostenido crecimiento. De todos modos, el comercio bilateral tiene mucho por crecer, y entidades como la nuestra tienen que hacer un gran esfuerzo para mejorar esas relaciones entre ambos países.”

    La Conexión Holando-Argentina.

    La pequeña Holanda alberga a una gran cantidad de empresas de peso mundial, muchas de las cuales están establecidas en la Argentina. En el rubro bancario, tres de las más importantes instituciones financieras del mundo son holandesas. En la Argentina operan el ING Bank, el ABN Amro Bank, el

    Bank Meespierson NV y el Rabobank Nederland. En la actividad petrolera, la poderosa Shell -la antigua Royal Dutch (Real Holandesa)- es la encargada de proyectar la imagen de los Países Bajos. En el área de la electrónica, Philips, otra empresa de renombre mundial, tiene una importante presencia en la producción y comercialización de electrodomésticos y otros artículos electrónicos. Unilever, el

    poderoso holding dedicado a la fabricación de artículos de limpieza y uso personal, también es de origen y capitales holandeses.

    En muchas de las áreas claves de la actividad económica empresas de origen o capital holandés – compañías como Shell o Unilever- han realizado durante el último lustro inversiones que prácticamente equivalen a establecerse otra vez en el país. Luncheon Tickets, que desde hace más de treinta años ostenta una posición de liderazgo en el mercado de los tickets alimentarios y en los servicios empresarios, es de capitales holandeses.

    Pero en la Cámara de Comercio Argentino-Holandesa hay una presencia mayoritaria de empresas argentinas que tienen intereses en Holanda. Es el caso, por ejemplo, del Grupo Bemberg, a través de su empresa Cervecería y Maltería Quilmes, que ostentaría una nunca desmentida participación

    accionaria en la cervecera holandesa Heineken. Ambas mantienen desde hace años proyectos empresarios conjuntos, como la planta de producción de latas de aluminio.

    Molinos Río de la Plata y Aceitera General Deheza, por su parte, han elegido a los Países Bajos y a su puerto de Rotterdam como una de las entradas de sus productos a los exigentes mercados de la Comunidad Europea.

    Lo que sigue es un breve perfil de empresas de origen holandés que han echado raíces y cosechado negocios en la Argentina.

    MAKRO.

    Un Mercado A Lo Grande.

    En 1993 SHB Holding NV -propietario de Makro-, con dos actividades principales, energía y distribución de productos de consumo masivo, facturó a nivel mundial US$ 11.300 millones y cuenta con 55.000 empleados alrededor del planeta.

    En Sudamérica, Makro sentó sus reales primero en Brasil en 1972, acompañando un momento de gran crecimiento de ese país. En 1987 la empresa se instaló en la Argentina y abrió su primera sucursal en marzo de 1988. Hoy cuenta con seis locales, ubicados en Capital, Gran Buenos Aires,

    Rosario y Córdoba. “El nuestro -puntualiza Julio Darriba, gerente general de la firma- es un negocio orientado a la venta a grandes consumidores sin importar su categoría. Pueden ser caterers, restaurantes, casas de comidas, salones de fiesta, comedores industriales, almaceneros, fiambreros o consumidores finales de alto poder adquisitivo.”

    Makro planea abrir tres sucursales más en el curso de 1995, y totalizar veinte en los próximos tres años, y prevé al término del próximo ejercicio facturar US$ 500 millones.

    En el rubro energía, SHB Energy está en tratativas con YPF para comprarle la parte correspondiente a distribución de gas envasado que anteriormente tenía Agip.

    NIDERA.

    Los Frutos de la Tierra.

    Fundada en Argentina hace 70 años por inmigrantes holandeses y establecida en ambas naciones, la empresa se ha dedicado a la exportación de granos y al desarrollo y producción de semillas híbridas, distribución de insumos agrícolas y producción y refinación de aceites vegetales, ramo de la exportación en el que ha sido una de las pioneras en el país.

    Nidera es un conglomerado agroindustrial cuyo intercambio comercial con Holanda representa 60% de su facturación anual, que es de aproximadamente US$ 500 millones.

    Con dos importantes plantas en Junín y en Puerto San Martín, al norte de Rosario -esta última con puerto propio-, Nidera tiene sucursales comerciales en todos los puertos de la Pampa Húmeda y en todos los países importadores de oleaginosas. “Estamos en un país -dice Martín Mayer-Wolf, su director- que tiene importantes ventajas comparativas en agricultura. En un mundo donde se

    mantienen estables los subsidios, si sigue aumentando la producción, empresas como la nuestra están muy bien preparadas para seguir creciendo.”

    ERVEN LUCAS BOLS.

    Un Brindis Secular.

    La primera botella de ginebra Bols llegó a suelo argentino en 1687, importada desde los Países Bajos.

    Ese fue el punto inicial para que la Argentina se convirtiera, junto a Holanda, en uno de los dos mercados más grandes de consumo de ginebra en todo el mundo.

    La casa matriz de Bols no oculta que debe su subsistencia en el mercado de su propio país a su filial argentina establecida aquí en 1935. Después de la invasión nazi a Holanda, la fábrica Bols fue clausurada, pero se le permitió importar la ginebra producida en la Argentina.

    A nivel mundial, la empresa factura US$ 1000 millones, y en la Argentina ostenta algo más de 50% del mercado en una cerrada disputa con su eterno rival: ginebra Llave. Erven Lucas Bols, que factura casi US$ 40 millones anuales en la Argentina, tiene asimismo una fuerte posición en el segmento de

    licores y es importadora del brandy Osborne y del champagne y vermouth Riccadona de Italia, y está a cargo de la distribución de los productos Suter.

    BANCO HOLANDES.

    Nuevo Nombre, Nuevo Perfil.

    Esta institución financiera establecida desde hace varias décadas en la Argentina se encuentra en el proceso de cambiar su nombre para asumir el de su casa matriz: ABN Amro Bank. Después de una notable reducción de estructura que comenzó a llevarse a cabo en 1991 -y que contrajo en 50% el

    número de sucursales-, llegó otra vez el momento de la expansión.

    El ABN Amro, redefinido ya su perfil, acomete un ambicioso plan que llevará el actual número de sucursales desde las cinco que ostenta a unas cuarenta durante el próximo trienio. La casa matriz aportará una significativa porción de los US$ 30 millones que demandará esta expansión. La actual estructura de ingresos de la entidad se compone en sus dos terceras partes por el sector mayorista y la restante por el minorista. Tiene 20.000 clientes, que con el plan de expansión piensa triplicar, con la mira puesta en el sector de población ABC1. Participa con 10% en la AFJP Anticipar y posee una sociedad de Bolsa, ABN Amro Securities. También administra el Fondo Común de Inversiones

    Capitales Argentinos, que se cuenta entre los diez más rentables del sistema.

    HARTMAN ARGENTINA.

    Desde el Jardín.

    Hartman es una de las empresas líderes a nivel mundial en la fabricación de muebles plásticos de jardín, contenedores para basura y pallets de plástico. Su facturación mundial supera los US$ 100 millones y las operaciones de su filial argentina, establecida en 1992, contribuyen aproximadamente con 10% a ese total.

    En la Argentina comercializa básicamente dos líneas de colecciones: una es la Hartman, dirigida a segmentos medios y altos, y la otra, la Aquarius, es una familia de productos más económica, de diseños más sencillos. Hartman Argentina es una subsidiaria ciento por ciento de su casa matriz holandesa, Hartman Groep BV que comercializa sus productos a través de distribuidores, mayoristas y minoristas en Capital e interior, y factura cifras cercanas a los US$ 10 millones.

    KLM.

    Más Vuelos hacia el Sur.

    La aerolínea de bandera holandesa inició sus operaciones en el país en 1952. “Sudamérica y especialmente la Argentina -destaca Krikor Geulemerian, director general de KLM para el Cono Sur- es un mercado evaluado como muy importante por nuestra casa matriz. Durante los últimos tres años, KLM aumentó sus frecuencias. En 1991, la compañía operaba sólo dos vuelos a Sudamérica.

    Hoy, brindamos el servicio con el Boeing 747 400, el jumbo más moderno del mundo. Tenemos tres vuelos semanales a Buenos Aires, de los cuales dos son ida y vuelta a Amsterdam, sin escalas.”

    El crecimiento de la compañía expresado en la intensificación de las frecuencias ha sido motivado por el creciente interés de turistas holandeses por visitar la Argentina. “Somos muy optimistas – concluye Geulemerian-; lo único que necesitaríamos para mejorar nuestra posición es que el gobierno argentino dote de una mejor infraestructura al aeropuerto de Ezeiza.”

    AKZO COATINGS.

    Un Negocio que Pinta Bien.

    AKZO Coatings pertenece al holding AKZO Nobel. Este conglomerado tiene cuatro divisiones, de las cuales tres operan en la Argentina: AKZO Chemical -división química-, AKZO Coatings -pinturas- y Organon -productos para el cuidado de la salud-. Falta la cuarta, la división fibras y polímeros, que

    no está aún representada.

    La AKZO Coatings compró 100% del paquete accionario de la firma de pinturas Miluz, en la que ya tenía participación desde 1979. En el país comercializa sus pinturas con dos marcas, Miluz y Sikkens.

    Está presente con sus productos en los mercados de terminales automotrices, varias industrias, resinas, actividad decorativa y repintado automotor. Tiene una facturación de US$ 24 millones, y fábricas en Buenos Aires y San Luis.

    ING BANK.

    Hacia la Banca de Inversión.

    El ING Bank, abreviatura de Internationale Nederlanden Bank es el producto de una fusión entre el NMB, el Postbank Group y la compañía de seguros Nationale Nederlanden. El NMB -antecedente del ING Bank- inició sus operaciones en Sudamérica en 1985 con la apertura de una sucursal en Montevideo. Hasta la década del ´80 era un banco con solo una filial en el exterior, en Nueva York. El

    ING Group tiene hoy activos por US$ 170 mil millones, un patrimonio neto de US$ 10 mil millones y ganancias que a diciembre de 1993 totalizaron US$ 900 millones.

    En la Argentina se dedica a la financiación de exportaciones, fundamentalmente agrarias. ING tiene la intención de posicionarse en nuestro país como banca de inversión.

    PHILIPS ARGENTINA.

    Con las Luces Encendidas.

    Fundada en 1890 en la ciudad de Eindhoven, en su trayectoria patentó inventos como la afeitadora eléctrica rotativa, las lámparas de ahorro de energía, el casete de audio, el Compact-Disc, y el CD interactivo, entre otras de las 60.000 patentes con las que cuenta en su haber. Philips creció hasta convertirse en un gigante de la producción de electrónicos que hoy factura US$ 30.000 millones, con presencia en los cinco continentes.

    Se estableció en la Argentina en 1935, donde ha incursionado en numerosos rubros de la electrónica como los de audio y video, iluminación, pequeños electrodomésticos, productos para el cuidado personal como afeitadoras y secadores de pelo, y elementos de cocina y aspiradoras. Factura US$ 250

    millones anuales y emplea a 850 empleados.

    “La casa matriz holandesa -dice Alejandro Manzanares, uno de sus gerentes de marketing- nos considera la filial mimada. La apertura económica ha permitido la compra financiada de nuestros productos y con eso experimentamos un gran crecimiento.” Philips está efectuando remodelaciones de sus plantas y poder responder así a una demanda en aumento.