¿Qué significa, realmente el éxito?

    El éxito no consiste en adquirir riqueza, poder, fama o estatus social. Aunque estas cosas por lo general suelen venir junto con el éxito, no se puede afirmar que sean su característica distintiva.

    El éxito es siempre algo que nos hace sentir bien, algo que saca el máximo provecho de nuestro potencial y que contribuye al bien de la sociedad.

    Esta definición pertenece a Tom Morris, autor del libro True Success (El verdadero éxito, Grosset/Putnam, US$ 22,95).

    Según Morris, el éxito puede estar en iniciar una empresa o llevar adelante una organización, pero también puede venir de una actividad no remunerada, como enseñar a leer. “Estamos en este mundo para ocuparnos de la contribución que somos capaces de hacer”, dice.

    El autor, profesor de filosofía de la Universidad de Nôtre Dame (South Bend, Indiana, Estados Unidos), presenta un cuerpo unificado de principios, con lo cual, en lugar de un ensayo filosófico sobre la naturaleza del éxito, brinda al lector algo así como una guía práctica para ser exitoso. Según él, para tener éxito en cualquier actividad hace falta:

    * Una concepción de lo que se quiere. Esto significa tener una visión, un objetivo o un conjunto de objetivos.

    * Concentración en todo lo que hay que hacer. Es preciso preparar, planificar y realizar. Morris dice: “El mundo tiene más espectadores que los que necesita. Hacen falta más actores, más participantes, más catalizadores, más agentes de cambio…”.

    * Coherencia en lo que se hace. Es preciso ser persistente, aun después de haber fracasado.

    * Participación de la energía emocional. Morris cita a Emerson, quien dijo: “Nada grande se consiguió nunca sin entusiasmo”.

    * Personalidad íntegra. La integridad inspira confianza y hace que la gente sume su esfuerzo.

    * Capacidad para disfrutar del proceso. El camino debe ser ameno, además de estimulante.

    El libro de Morris ofrece principios, ejemplos y comentarios que convierten la lectura de sus páginas en una experiencia enriquecedora. El texto es tan entretenido que compensa la extensión. Además, es evidente que el autor ha estudiado el tema con la suficiente profundidad como para dar opiniones

    autorizadas.