Desde la licitación del servicio telefónico básico que se adjudicaron Telecom y Telefónica hace más de tres años, la mayor apuesta para entrar en el negocio la protagonizaron a fines de 1994 siete grupos económicos de primer nivel y operadores internacionales del relieve de GTE y AT&T, que tras su destacada actuación en la Guerra del Golfo salieron a conquistar espacios fuera de las fronteras. La telefonía celular móvil del interior en la Argentina fue una de las piezas buscadas.
El interés quedó demostrado no sólo en un programa de inversiones en más de 700 celdas y en digitalizar toda la red, que supera los US$ 600 millones en los próximos dos años, sino que la propuesta desde el punto de vista tecnológico proyectó el negocio de las telecomunicaciones hacia el 2000.
Los principales nuevos actores en esta etapa provienen de Estados Unidos, que es donde las necesidades de expansión de las firmas más comprometidas con la tecnología de punta resultan más acuciantes.
La Compañía de Teléfonos del Interior (CTI) que ganó el concurso asocia a la norteamericana GTE (23% de las acciones), con el grupo editorial AGEA-Clarín (22%), Intercel (una compañía inversora que integra Benito Roggio, 20%), la Compañía Austral de Inversiones, Morgan Grenfeld y Cía (20%), la proveedora de equipos AT&T (10%) y TCW American Development (5%).
La oferta fue preparada directamente por GTE de un modo lo suficientemente holgado como para no correr riesgos. Tanto fue así que antes de conocerse el resultado ya había zarpado rumbo a la Argentina el primer cargamento de centrales, hecho que se encargó de destacar el propio presidente de la corporación en enero, durante su breve visita al país.
GTE atiende en Estados Unidos las necesidades de 10% de los 15 millones de abonados on line, y además es la segunda proveedora de telefonía celular. En las telecomunicaciones de todo el mundo figura cuarta: facturó en el último ejercicio US$ 20.000 millones. A nivel internacional estableció sólidos lazos comerciales con Telefónica de España.
Su compatriota en CTI es AT&T, líder de productos destinados a redes de telecomunicaciones, de la que es clienta y a la vez competidora en el servicio de larga distancia, el octavo desprendimiento del monopolio que ejercía la Bell hasta el momento del fallo judicial que la obligó a dividirse. AT&T brinda también servicios a proveedores que operan estaciones de transmisión.
Según explicaron sus asesores en comunicación, ninguno de los socios de la CTI atenderá requerimientos de la prensa hasta después de celebrado el contrato con la Comisión Nacional de Telecomunicaciones.
Del otro lado del mostrador hubo relevo de hombres. El anterior subsecretario de Comunicaciones, Germán Kammerath, dejó su puesto a Oscar González cuando ganó la diputación por Córdoba para la Ucedé, y en la presidencia de la CNT asumió Reinaldo Colomé.
COMUNICACIONES INTEGRADAS.
Otro movimiento importante que se registró recientemente fue la adquisición de 80% de la productora local de sistemas de telefonía digital Ringer por parte de Northern Telecom y Citicorp Equity Investments.
Como no toca el segmento celular, el proyecto local no acusó el impacto de la separación a nivel internacional entre Northern Telecom y Motorola. Aquí se dedicará a “proveer centrales telefónicas y diseñar sistemas de comunicación para el mercado privado, donde se está renovando 15% anual del parque. En los últimos tres años, Ringer acaparó 40% de esa demanda”, expresó su presidente, Enrique Miguens.
Entre los logros exhibidos por la firma se encuentra el servicio 114 de reparaciones, contratado por Telecom y Telefónica, aunque esperan que el esfuerzo de capacitación realizado rinda sus frutos y puedan brindar otras soluciones integrales.
Miguens no cree que haya empresa en el mundo entero que pueda ir sola a ninguno de los grandes proyectos que se están dando en telecomunicaciones ni ofrecer la sofisticación que están exigiendo las dos prestadoras de servicios en la Argentina.
Afirma que “es abismal la diferencia entre el interior y Buenos Aires. La banda celular que acaba de ser licitada va a hacer que haya más gente, más demanda, más mercado para competir”. Tras aclarar que las empresas ya instaladas, como Siemens o NEC, ya van a otro ritmo, destaca que las recién
llegadas, como AT&T y Northern son las que vienen empujando más fuerte. “Bajo el paraguas de Northern, Ringer ahora apunta a lograr 25% del mercado”, pronostica.
CUMBRE EN BUENOS AIRES.
Como cierre de un ciclo de eventos regionales, los países miembros de la Unión Internacional de Telecomunicaciones se reunirán entre el 21 y 29 de marzo en la Primera Conferencia Mundial de desarrollo de las Telecomunicaciones, a realizarse en el hotel Sheraton de Buenos Aires.
El tema del encuentro organizado por la oficina de Desarrollo de las Telecomunicaciones (perteneciente a la Unión Internacional de las Telecomunicaciones) girará en torno de la reestructuración del sector. También se elaborarán pautas y propuestas tendientes orientar a los países participantes.
Intervendrán en la conferencia, entre otras personalidades internacionales, el escritor Alvin Toffler; Lewis Preston, presidente del Banco Mundial; Boutros Boutros-Ghali, secretario general de ONU.
Los oradores invitados expondrán experiencias y estrategias en las que las telecomunicaciones permitieron lograr progresos espectaculares. Participarán, además, unos 40 miembros de comisiones regionales, provenientes de 25 países.
Entre otros temas se abordará el papel de las telecomunicaciones en el mejoramiento de las condiciones de vida de poblaciones indigentes; en la creación de actividades económicas y oportunidades de empleo; en el suministro de medios para satisfacer necesidades esenciales en zonas rurales aisladas y de bajo nivel de ingresos, como la salud, la seguridad, los derechos civiles y en la protección y mejora del medio ambiente.
El evento está destinado a altos representantes de los gobiernos en las áreas de comunicaciones, planificación, organizaciones regionales e internacionales de desarrollo y de telecomunicaciones y de los organismos multilaterales y bilaterales de financiación; ejecutivos superiores, gerentes, planificadores empresariales y administradores de industrias de fabricación y proveedoras de
servicios.
Irrumpen los diarios.
DETRAS DE LAS NOTICIAS.
Los medios de difusión no sólo acudieron al Confer por licencias para radios, televisión abierta y cables, sino que apuntaron a la telefonía y a los satélites como gran objetivo estratégico. Con una facturación que excede los $ 300 millones anuales, el diario Clarín se encarama en la producción del papel que consume junto con sus competidores. Abre una agencia de noticias.
Compra una radio, un canal de televisión, una emisora de cable que expande hacia la Capital y el Gran Buenos Aires, controla las transmisiones de fútbol y recala en la telefonía celular del interior asociado con dos gigantes, como las norteamericanas GTE y AT&T.
Su avance sobre los medios y la tecnología es una constante desde que el gobierno de Carlos Menem introdujo las reformas económicas, paradójicamente tan resistidas desde el poderoso holding periodístico.
Pudo haber sido la proximidad de la firma del contrato con el Estado para la concesión de la licencia de la banda de telefonía celular móvil en el interior la excusa que privó a MERCADO de recibir de boca de los propios interesados la visión estratégica que los guía cuando incursionan en nuevos negocios. Así y todo, es posible visualizar los trazos esenciales del cuadro:
*Desde que el grupo Macri quiso desprenderse de su participación en Movicom, Clarín intentó entrar, asociándose al mismo tiempo con aquél en la explotación de un satélite doméstico;
*La presencia en telefonía celular apunta a posicionarse para 1997 a las puertas del monopolio de la básica que, por lo menos hasta entonces, se reparten Telecom y Telefónica;
*La formación de una red del tipo de la brasileña O´Globo mediante la adquisición de emisoras de cable en el área metropolitana abre, a la vez, la posibilidad de una comunicación interactiva en el futuro, cuando sea rentable la tecnología de banda ancha celular, desarrollada por su socia en la Compañía de Teléfonos del Interior AT&T;
*En los círculos especializados se comenta que el holding editorial ha empezado a instalar fibra óptica en recorridos comunes con Telefónica: ¿Aprovecharán en el futuro juntos la red?
*El diario resignó en manos de su tradicional amigo y socio en Papel Prensa, La Nación, el interés que demostrara en un principio por el satélite Nahuel; claro que antes se aseguró que marginaran del consorcio a su acérrimo enemigo, Julio Ramos.
La política de Clarín en el terreno de las telecomunicaciones superó en todos los terrenos al resto de los medios:
*La Nación (que infructuosamente trató de ingresar en la telefonía celular con Bunge & Born) compró Radio del Plata, fundó el Cable de Buenos Aires en sociedad con Alejandro Romay y accedió al satélite.
*Crónica salió con un canal de cable especializado en noticias y la Radio Buenos Aires.
*La Razón de los hermanos Spadone avanza con un cable en el Gran Buenos Aires;
*La Prensa de Amalia Fortabat será relanzada bajo una nueva conducción periodística a cargo de Marcos Cytrynblum (ex Clarín), e integrada a las radios El Mundo y Horizonte y a un cable recientemente incorporado;
*Telefé adquirió media docena de cables, pero sin concretar un plan más o menos uniforme;
*América TV de Eurnekián conformó un pool de programaciones con VCC para abarcar más bocas de salida por cada señal;
El próximo gran bocado serán las privatizaciones de ATC y Canal 4, donde La Nación, La Prensa de Amalia Fortabat, Ambito Financiero de Julio Ramos, Gerardo Sofovich y hasta la editorial Perfil de Jorge Fontevecchia se disputarán un lugar en las dos últimas estaciones de televisión por aire que quedan para terminar de formular la política multimedios de los grandes actores.