El camino de las oportunidades


    Por Gustavo Baiman

    El primer centenario. Una visión que hoy cuestiona la Presidenta

    La facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires organizó durante junio pasado el segundo Congreso Internacional de Economía y Gestión (ECON). Las jornadas reunieron a importantes referentes nacionales e internacionales de las ciencias económicas.
    Uno de los temas abordados fue “La Argentina del bicentenario – Ideas para la refundación”. De esta mesa participaron Miguel Kozuszok, presidente y CEO de Unilever de Argentina; Carlos Ormaechea, presidente de Tecpetrol S.A. – Techint y Enrique Cristofani, presidente del banco Santander Río.
    Los tres expositores coincidieron en definir que la Argentina tiene una gran oportunidad de crecimiento apuntando fundamentalmente al escenario internacional. Sin embargo, aclararon que sin la participación del Estado para orientar estrategias, el momento favorable se puede desaprovechar y detener el ritmo de crecimiento.
    Otros de los puntos importantes que resaltaron fueron la búsqueda de objetivos comunes, el aprovechamiento de los recursos naturales y humanos, la reducción de la pobreza y el cuidado del medioambiente. Los oradores subrayaron, también, la necesidad de tener políticas de largo plazo, para ofrecer un marco de previsibilidad que ayude a la inversión.
    Carlos Cristofani abrió el debate argumentando la necesidad de buscar objetivos comunes para pensar la Argentina del bicentenario y remarcó la gran oportunidad de ser uno de los cuatros principales productores de alimentos en el mundo, junto a Brasil, China e India.
    “La demanda de nuestros recursos naturales es una gran oportunidad y se le suma, además, la demanda de nuestros recursos humanos. Tenemos que aprovechar esa capacidad; combinamos muy bien calidad y costo. Es una posibilidad que tenemos como país y hay que saber utilizarla esencialmente para reducir la pobreza, que es mucha”, dijo Cristofani.
    Para Ormaechea los objetivos tienen que estar puestos en la visión de largo plazo porque es la manera de orientar la asignación de recursos y resaltó que es una de las principales características del crecimiento sostenido porque significa una acumulación de esfuerzos en una misma dirección.
    “Es necesario tener esta visión de largo plazo, no sé si compartida pero sí conocida. Por otra parte, a la larga, la única forma de crear valor con criterio sustentable es poder desarrollar alguna ventaja competitiva, alguna forma de diferenciarse, porque eso es lo que permite capturar una renta. Tiene que haber un uso eficiente de los recursos y saber administrar la puja distributiva”, dijo Ormaechea.
    Otros de los puntos que marcó el presidente de Tecpetrol es la inclusión social como herramienta del crecimiento: “sin una distribución equitativa de la riqueza se genera intranquilidad, tensiones y rupturas y éstas son interrupciones y las interrupciones paran el proceso de crecimiento sostenido”.
    El eje temático expuesto por Kozuszok fue la búsqueda del camino del éxito. Para alcanzarlo destacó como primera medida tener una estrategia de país y un acuerdo social formado sobre las instituciones. Este camino, aseguró, lo siguieron las sociedades que estaban convencidas de haber empezado el cambio.
    “Una de las ideas para la refundación de la república –dijo Kozuszok– es pensar cuál es el camino que nos conduce al éxito. Para esto se necesita, primero, un país donde uno se pueda desenvolver, crear y producir libremente. Es necesario entender que cada vez hay menos diferencia entre un país y una empresa. Las naciones entendieron que tienen que generar riquezas y las empresas comprendieron, a su vez, que tienen que ser buenos vecinos, cuidar el medioambiente y tener responsabilidad social, es decir, que no pueden generar riqueza a cualquier precio. Para estar integrados al mundo se necesita salud fiscal, políticas distributivas y un crecimiento sustentable y rentable”.
     
    El rol del Estado
    Para el presidente del Santander, la principal razón del fracaso como país fue la incapacidad de trabajar en equipo y la dificultad de contar con una dirigencia política, empresaria y sindical que dialogue, que busque consensos y que ponga metas comunes, y apuntó al Estado como el principal responsable de estas carencias.
    “Es fundamental tener políticas de Estado, políticas que involucren a la dirigencia en un sentido amplio, que excedan a un Gobierno; estamos hablando del largo plazo y de previsibilidad. En términos económicos, hoy a diferencia de hace unos años, hay más consenso en cuanto a algunos objetivos macroeconómicos. Queda clara, por ejemplo, la importancia de tener superávit fiscal, de un tipo de cambio competitivo, de tener inflación baja y de que el país esté integrado al mundo”, dijo Cristofani.
    En este sentido, Ormaechea aseguró que el rol del Estado es imprescindible para cualquier proceso de crecimiento. La gobernabilidad, aclaró, se explica como la capacidad que tiene un Estado para llevar adelante una estrategia.
    “Previsibilidad y consistencia son dos conceptos que están en la misma línea, pero básicamente apuntan a reducir la incertidumbre. La incertidumbre es la enemiga de la inversión, incertidumbre es riesgo y riesgo es costo; a más costo menos proyectos son viables. Entonces, la previsibilidad baja los costos y agiliza proyectos y abre caminos. En todo este proceso el Estado tiene que cumplir un rol. El primero es asegurar que las condiciones básicas ocurran. Pensamos que el Estado contribuye y participa, fijando cuáles son las prioridades. Esto es lo que permite alinear esfuerzos”, dijo Ormaechea.
    El presidente de Tecpetrol agregó que otra de las funciones del Estado es el direccionamiento de la economía hacia sectores que conciten menos atención a los privados. “El Estado tiene que establecer y hacer funcionar bien marcos regulatorios especialmente donde el mercado no garantice la existencia de una competencia que en definitiva se traduce en un perjuicio para el consumidor”.
    Kozuszok agregó al planteo un dato: “Si tomamos el período 1821-2001 podemos ver que fueron 180 años de interrupciones con 28 crisis económicas. El promedio de crecimiento de ese período fue de 3,4%; esto nos indica que hasta ahora no lo hicimos muy bien”.
    Otras consideraciones que formuló el presidente de Unilever en relación al rol del Estado es el liderazgo, la dirección y la estrategia y, en este sentido, enumeró algunas claves: una es la misión estratégica, que tiene que ver con las metas, el crecimiento sostenido, el desarrollo de los mercados y los valores con los cuales hay que trabajar.
    “Es importante entender cuando uno se plantea un horizonte a largo plazo, que el pasado no garantiza ni condena el futuro. Otra tema importante es que una empresa o país tenga un conjunto de valores y que la misión y estrategia sean ambiciosas pero a su vez realistas”.
    “Por último hay que destacar el rol del líder. Las personas que llevan adelante los proyectos tienen que saber cómo estimular, tienen que anticiparse a los hechos, dirimir con justicia y tener generosidad. Tenemos oportunidades si sabemos combinar el capital natural y el capital humano. Si es una política más a la derecha o más a la izquierda, para mí no tiene mucho significado. Lo que importa es que decidamos de una vez por todas ir para adelante”, concluyó Kozuszok.