Por Emilio Barreira
Una nueva arquitectura tecnológica está irrumpiendo en la actividad bancaria, cambiando los paradigmas tradicionales. Responde al nombre de SOA, y surge de la abreviatura de Service Oriented Architecture.
El enfoque se basa en que los negocios se tangibilizan en procesos, los cuales están constituidos por secuencia de funciones, muchas de las cuales son comunes a numerosos procesos del negocio.
Construir una aplicación en esta arquitectura SOA implica conocer los procesos del negocio, clasificarlos, extraer las funciones que son comunes a ellos, estandarizarlas y formar con ellas capas de servicios que serán requeridas por cualquier proceso de negocio.
Las ventajas operativas en términos de rapidez de implementación de nuevos procesos, la economía en el mantenimiento de estas arquitecturas, la agilidad intrínseca en su diseño, el hecho de “programar una vez y usarla todas las veces que se necesite”, las convierte en un elemento clave en términos de la capacidad competitiva y disminución de sus costos en el sector bancario.
Son potentes las facilidades que entregan para la integración física y lógica de los canales de distribución en la actividad bancaria, unificando plataformas y reglas de negocios.
La centralización transaccional del banco permite operar en tiempo real durante los 7 días de la semana y las 24 horas del día, haciendo posible una real y certera capacidad para la administración de los canales de distribución bancarios y la implementación de un relacionamiento inteligente con el cliente que abre el camino a potentes estrategias comerciales, que significaban altos costos y fuerte complejidad en las arquitecturas tradicionales.
Estas características facilitan, a su vez, la optimización de inversiones en los diferentes canales basadas en precisas tasas de retorno, convirtiendo a estas arquitecturas en soluciones con un alto contenido estratégico, tanto o más importante que sus facilidades operacionales.
Otro aspecto donde SOA entrega ventajas evidentes –comparándola con las arquitecturas tradicionales– es en la agilidad y rapidez que posee, por su estandarización para responder a diferentes requerimientos de nuevos servicios y productos. Mejora sensiblemente el time-to-market y con bajo costo de desarrollo.
Estas facilidades permiten llevar a cabo múltiples estrategias comerciales dirigidas a segmentos de mercado, con una rentabilidad y eficiencia muy difíciles de alcanzar con las arquitecturas tradicionales.
Menores costos
La adopción de estas arquitecturas tiene un fuerte impacto en la disminución de los costos de mantenimiento y explotación, a la vez que reduce considerablemente el riesgo operacional diario.
La estandarización de las funciones, la ausencia de acoplamientos entre aplicaciones e interfaces tienden a asegurar una alta estabilidad en las aplicaciones minimizando las tareas de testing y eliminando la propagación de errores a través de acoplamientos de aplicaciones.
La estandarización que es inherente a SOA –la cual determina que más funciones se realizan con menos código– hace más simple y efectivo el mantenimiento de la aplicación. A su vez, por lo estándar, pocos son los componentes que requieren modificaciones, lo que reduce tiempo, desarrollo y complejidad a las tareas.
Además introduce una fuerte coherencia y homogeneidad en los procesos que lleva a cabo el cliente o el usuario, incrementando la confiabilidad y la coherencia del servicio al cliente, independientemente de la hora y tipo de canal por el cual se accede a los servicios.
Este enfoque arquitectónico es especialmente atractivo para bancos medianos, ya que permite realizar la implementación de nuevas facilidades aunque no se posea una fuerte estructura de recursos en IT, como la de los grandes bancos.
El Gartner Group, en su primer informe del 2002, asevera que los gastos en el desarrollo de una infraestructura SOA son particularmente importantes para los bancos medianos, con el fin de mejorar la eficiencia operativa y reducir el time-to-market. Concluye que: “Los bancos que no adopten arquitectura SOA corren serios riesgos de desventajas competitivas para el 2007.”
Esta conclusión se basa en que muchos bancos medianos serán capaces de ofrecer los mismos servicios y productos que sus grandes competidores, simplemente agregando capacidades sobre una base modular sin reingenierías masivas en sus arquitecturas.
Este enfoque SOA, según Gartner, será crucial para los bancos en el futuro y vaticina la extinción de los antiguos paquetes integrados bancarios, ya que los bancos no podrán esperar obtener todas las funcionalidades que se necesitarán en el futuro de un solo vendedor, y porque ya no será posible encerrarse en un solo paquete de soluciones.
Como ejemplo, un banco identifica a la administración de fondos provenientes de segmentos de altos ingresos como una muy buena oportunidad, pero nunca antes ha ofrecido este tipo de servicios y productos a ese segmento.
En una arquitectura SOA puede implementarlo rápidamente y a bajo costo dentro de la capa de sus aplicaciones, creando las nuevas. SOA le permite al banco embeber componentes estándares de sus aplicaciones en un nuevo sistema de administración de banca privada, con el mismo look and feel.
Cuando un banco tiene estandarizados los elementos de su arquitectura, éste puede construir dinámicamente sobre ellos; más aún, cuando un banco diseña procesos o almacena datos para una operación sobre un canal, puede extender al mismo instante las mismas facilidades a todos los canales, sin incurrir en costos adicionales y con total seguridad, haciendo cambios sólo en la interfase del usuario. Por ejemplo, si el banco decide permitir que desde sus cuentas se pueda realizar la transferencia de fondos hacia otras instituciones, éste sólo deberá acoplar al cliente/cuenta el número del banco para transferencias externas. El uso de estructuras SOA le permite al banco hacerlo una vez, seguir un camino de datos y dejar la información disponible para todos los canales de acceso.
Esta visión muestra el camino lógico para el uso y re-uso de la información y procesos por medio de componentes estándares instalados y su aprovechamiento en las futuras aplicaciones.
Cambios de paradigmas
Pocos son los bancos que estarán capacitados para construir nuevas facilidades en forma rápida para responder a un mercado competitivo si no poseen arquitecturas SOA.
Esto explica por qué los analistas internacionales ponen un profundo acento en sus recomendaciones sobre el uso de estas nuevas arquitecturas y vaticinan, como factor de alto riesgo, la no adopción de estas nuevas arquitecturas, en especial para bancos medios y pequeños.
Ya en un mencionado informe del año 2002, el Gartner sostenía: “Un enfoque que está ganando actualidad es la implementación de lo que se ha dado en llamar S.O.A. (Service Oriented Arquitecture), un diseño que posibilita el uso de piezas de software sobre una red, re-usarla, e igualmente importante, posibilita que los datos también sean re-usados por diferentes componentes. SOA parece ser la llave que emerge como un diferenciador para los bancos líderes del mundo para 2005, con pronóstico de 0.8 de probabilidad.”
Pero la experiencia empieza a demostrar que no todas son rosas en el camino de SOA. La arquitectura plantea a los diseñadores y analistas funcionales cambios de paradigmas que necesariamente chocan con enfoques culturales y prácticas tradicionales de difícil superación.
De por sí, la necesidad de la estandarización conlleva a un enfoque formal, disciplinado y muy metódico en el planteo del desarrollo, sumado al vasto conocimiento del contexto del negocio en el cual se ha de aplicar. En estas arquitecturas prima el negocio, mas que la tecnología.
Las estructuras de IT con fuerte acento en lo tecnológico han de requerir de la colaboración de analistas funcionales de operaciones, comercialización, planeamiento y finanzas bancarias para asistirlos en los diseños a estandarizar, y para la construcción de las capas de servicios que facilitarán la obtención de la flexibilidad suficiente, capaz de asegurar los excelentes resultados que fehacientemente entrega este nuevo tipo de arquitectura.
El corrimiento del factor tecnológico al factor negocio es el desafío a superar en los nuevos paradigmas de la tecnología de los servicios financieros. M
Evolución de los diseños de aplicaciones En su último informe de julio del 2005, Gartner no sólo afirma y acierta en las probabilidades ya planteadas en su informe del 2002, sino que publica un reciente estudio realizado sobre la banca y el tipo de arquitectura que se viene adoptando para el desarrollo de sus aplicaciones, en el cual se concluye que sólo 8% de los bancos ha continuado diseñando sobre arquitecturas tradicionales; otro 8% aún no tiene decidida su elección; 78% optó por SOA, donde 44% tiene un enfoque SOA puro y 34% tiene un planteo mas híbrido entre SOA más EDA (Event Drive Arquitecture); y el restante 6% adoptó un enfoque EDA puro.” |
La migración del Citibank Celent Communications en su publicación “A case study of Citibank” realiza un cálculo sobre los costos que significa la migración del viejo sistema Cosmos del Citibank hacia esta nueva generación de arquitecturas y estima una inversión de US$ 35 millones anuales, con un ahorro en gastos de mantenimiento y mayor velocidad en los lanzamientos de nuevos desarrollos de US$ 100 millones anuales. Esto arroja un cuadro de resultados que le ha permitido autofinanciar todo la migración con saldo positivo, y se estima un beneficio anual de US$ 80 millones. (Ver cuadro 2) |