Quién tiene el poder de compra en las empresas

    Dos terceras
    partes de todas las compras de productos y servicios que se realizan anualmente
    en el país, son transacciones entre empresas. Es el poderoso segmento
    btob, (business to business) poco explorado, pero donde se concentran las
    mayores oportunidades de negocios. Para toda firma que venda productos de
    informática, que ofrezca servicios financieros, servicios de consultoría
    o capacitación, equipos de telecomunicaciones, flotas de vehículos,
    creatividad publicitaria, o cualquier otro rubro de la amplia gama de la
    oferta disponible, se trata de contar con información vital. Para
    los equipos de venta de las empresas vendedoras es esencial conocer las
    tendencias y hábitos de compra, si se proyecta renovar equipos en
    qué volumen y en qué tiempos. Más importante aún,
    saber quién –en cada organización, según tamaño
    y actividad– orientará la intención de compra y en última
    instancia, quién tomará la decisión final de adquirir
    el producto o servicio que interese.
    Esta es la primera exploración a fondo que realiza MERCADO en este
    desconocido universo, que aporta pistas, claras señales, datos valiosos
    y precisa donde radica el poder de compra en cada caso.
    El relevamiento realizado alcanzó a 128 empresas de distinto tamaño
    y esfera de actividad. El cuestionario fue diseñado y analizado en
    sus resultados por la consultora Total Argentina, bajo la dirección
    de la licenciada Susana Beer. El procesamiento de los datos estuvo a cargo
    de Telesurvey, la empresa de investigación de opinión pública
    que dirige Heriberto Muraro.
    Los resultados de la investigación se concentran en cinco capítulos:
    1.– Las características del universo consultado.
    2.– Los productos “estrella” o aquellos que con mayor frecuencia
    e intensidad se demandan, y donde deben esperarse las mayores novedades.
    3.– La descripción de todos los productos o servicios que se
    poseen o se utilizan.
    4.– Los rubros donde hay intención de cambio, es decir, de realizar
    en forma inmediata nuevas adquisiciones.
    5.– Finalmente, el dato vital: cuáles son las gerencias dentro
    de cada organización que intervienen en el proceso de orientar el
    proceso de seleccionar un vendedor, y en dónde reside la decisión
    final de compra.

    La muestra
    Del total de empresas que respondieron en este relevamiento, dos terceras
    partes actúan en el sector servicios; 16% en el campo industrial;
    8% en la actividad comercial; y 10% en otras –combinación
    de las anteriores–.
    Si se considera el número de empleados, las unidades económicas
    que representan a los servicios y que tienen hasta 15 empleados aportan
    79%; las que ocupan de 16 a 99 empleados, 57%; y las que tienen una nómina
    superior a 100 empleados, 61%. En cambio las firmas industriales, son
    9%, 14% y 26%, respectivamente.
    La orientación es clara: se ha privilegiado la indagación
    sobre el sector Pyme y empresas medianas. Las grandes empresas no tienen
    participación significativa en este examen.
    En todo caso debe tenerse en cuenta que este trabajo es un relevamiento
    que sólo marca tendencias y sus resultados, por no tratarse de
    una muestra seleccionada probabilísticamente. En consecuencia,
    no deben tomarse como conclusiones numéricas representativas del
    universo de empresas en Argentina.
    Lo que surge con nitidez es la significación de las empresas emergentes,
    ubicadas en el difuso campo de las Pymes, que demuestran un enorme potencial,
    gran poder de recuperación, capacidad para sustituir importaciones,
    y sobre todo para generar empleos.
    El total de las empresas consultadas tiene una dotación de 4,3
    gerentes como promedio.
    La figura del gerente general está presente en 25% de los casos
    (42% en el segmento que ocupa menos empleados); la gerencia administrativa
    en 24% (29% en el tramo intermedio); la gerencia comercial en 23%; la
    de marketing en 21% (con 28% entre las que emplean más de 100 empleados);
    la gerencia de compras en 6%; la de sistemas en 6% (igual que en el caso
    anterior, asciende a 9% en el segmento de mayor cantidad de empleados);
    la de Producción en 5%; y finalmente la de Recursos Humanos en
    3%.
    Las conclusiones son elocuentes: para toda la muestra, la figura del gerente
    general es de enorme importancia. También, aunque a distancia,
    la del gerente administrativo y la del comercial.
    Cuando se trata de empresas más grandes, que emplean arriba de
    cien empleados, adquiere relevancia la gerencia de marketing y la de sistemas.
    En cambio, para toda la muestra, la presencia de un gerente de compras
    es pobre, y todo indica que su presencia es más frecuente en empresas
    de mucha mayor envergadura.
    Para reforzar la identidad de quienes respondieron (segmento Pyme y medianas
    empresas) se comprueba que 76% de ellas se concentran exclusivamente en
    el mercado interno; 4% se dedican a exportar; y 20% cubren los dos frentes.

    Los productos
    o servicios “estrella”

    Para quienes están en el negocio de proveer, de vender, este capítulo
    es una referencia insoslayable. De aquí surgen con nitidez cuáles
    son los productos y servicios que más se demandarán en el
    futuro cercano.
    Como era presumible, se confirma la tendencia a la adquisición
    de nuevos productos informáticos: un abrumador 93% de la muestra
    declara su intención de dar este paso. Las proporciones son bastantes
    parejas en las tres subcategorías establecidas. Sin embargo, entre
    las empresas de más de 100 empleados el indicador llega a 95,4%.
    Hay un correlato entre este hallazgo y lo que acontece en el campo de
    la tecnología informática en todo el mundo, y también
    el resurgimiento de ventas que se aprecia en nuestro país.
    Interesantes comprobaciones se advierten cuando se analiza la intención
    de compra en hardware y en software. En el primer caso, el porcentaje
    de los que planean compras llega a 81,2 (90,7% en las empresas con más
    de 100 empleados). En el segundo, el porcentaje total es de 75 (88,4%
    entre las mayores consideradas en esta muestra).
    Cuándo se inquiere en dónde reside el poder de compra en
    este caso, las de menos de 15 empleados responden que en el gerente general
    y/o el gerente administrativo (65%); las de 16 a 99 empleados, en el gerente
    general, el administrativo y el de sistemas (76%). En las de más
    de 100 empleados, como es natural, depende del gerente de sistemas (56%)
    que tiene mayor presencia y gravitación en este segmento.
    En orden de importancia siguen los equipos de telecomunicaciones. 59%
    de la muestra tiene voluntad de realizar nuevas adquisiciones (otra vez,
    65,1% entre las de mayor tamaño relativo).
    Las empresas planean realizar cambios, y en consecuencia hacer adquisiciones,
    en telefonía celular – un área al rojo vivo por la
    intensa competencia– y en equipos varios de comunicaciones.
    En lo que se refiere a telefonía celular, 45,3% del total hará
    compras. Curiosamente el porcentaje es igual entre las más pequeñas
    empresas y las más grandes: 49%. En el medio, las que tienen de
    16 a 99 empleados, el porcentaje es 38%.
    El porcentaje es casi idéntico cuando se trata de equipos varios
    de comunicaciones: 49, 38, y 49%, respectivamente para cada subsector.
    Con referencia al poder de decisión, en los dos primeros segmentos
    reside exclusivamente en el gerente general. En el tercero, es responsabilidad
    compartida entre el gerente administrativo y el gerente de sistemas. Es
    decir que el nivel de decisión baja un escalón entre las
    más grandes de esta muestra.
    Como ocurre cuando se insinúa una recuperación en el nivel
    económico y se comprueba mayor actividad de las empresas, hay intenciones
    de invertir en el área de capacitación del personal (37,5%
    del total piensa hacerlo).
    Para las tres categorías de empresas analizadas, esa decisión
    de contratar capacitación se refleja de distinta manera: 39,5%;
    28,6%; y 44,2%. Es decir, es mayor entre las más pequeñas
    y las más grandes de la muestra.
    Otra comprobación valiosa es que entre las de menos de 15 empleados,
    la decisión es casi excluyente entre el gerente general y el gerente
    administrativo (56%). En la de 16 a 99 empleados, corresponde al gerente
    general y al de recursos humanos (48%). Para las de más de 100
    empleados, es privativa del gerente de recursos humanos (51%).
    Cuando se consulta por actividades de consultoría, 39% declara
    su intención de invertir en este campo, en diversas especialidades.
    El porcentaje es mayor entre las empresas más grandes (44,2%).
    Sobre otros insumos y equipamiento tecnológico, 38% piensa en nuevas
    inversiones y adquisiciones. También las más grandes relativas,
    ostentan el mayor índice: 41,8%.
    En materia de servicios financieros, 26% del universo piensa cambiar o
    incorporar prestaciones. Curiosamente, el mayor indicador corresponde
    a las empresas más pequeñas: 34,9% (el rubro incluye seguros
    generales, servicios prestados por los bancos, y tarjetas de crédito
    corporativas).
    Un gran capítulo que se ha englobado como “otros servicios”
    incluye cambios o decisiones que se harán efectivas en el futuro
    cercano en rubros tales como correo nacional o internacional; servicios
    de mensajería; certificación de normas de calidad; presencia
    en exposiciones y muestras; utilización de agencias de viaje.

    Inventario
    de lo
    que se posee o utiliza
    El escenario ideal para un gerente de ventas orientado al btob es tener
    un minucioso detalle de todos los productos y servicios que posee y utiliza
    un potencial comprador. Con esa información puede programar la
    frecuencia de sus contactos y el mensaje a transmitir en cada caso, especialmente
    cuando se vislumbra la posibilidad de renovación de equipamiento
    o de cambios en proceso de compras.
    Ese objetivo se ha logrado, por lo menos, para toda la muestra consultada.
    Los resultados permiten diseñar estrategias de acercamiento.
    Por ejemplo, cuando se habla de productos informáticos, 98% responde
    que tienen computadoras personales; 99% dispone de impresoras; y 95% cuenta
    con un proveedor de servicios de Internet. Lo que implica que en algún
    momento estarán dispuestos, con mayor probabilidad, a reforzar
    el actual equipamiento, a modernizarlo o a buscar un proveedor que las
    satisfaga más.
    En el caso de equipos de telecomunicaciones, 89% de las empresas consultadas
    cuenta con central telefónica; 91% utiliza celulares; 31% establece
    comunicaciones por radio: 19% utiliza un sistema de comunicaciones integrado.
    Además, 97% dispone de fax, apenas 9% de pager; ; 27% utiliza call
    center; 85% está abonado a servicios telefónicos de larga
    distancia nacional; y 77% de larga distancia internacional.
    En “otro equipamiento vinculado a la tecnología”, la
    penetración es menor, tal vez porque no se lo registra como imprescindible.
    De cualquier manera abre una ventana de oportunidad para los proveedores
    de esos equipos.
    Así, del total de la muestra, 65,6% cuenta con fotocopiadoras;
    88,3% con scanner; 46,9% con proyector laser; 46,1% con proyector de transparencias;
    23,4% con equipo para videoconferencias; y 7,8% con video wall.

    Hay una gama
    de servicios especializados y de consultoría que se ofrecen a las
    empresas y que son demandados con distinta intensidad según el
    sub–segmento de empresas de la muestra, y de la utilidad percibida
    de estos asesores o consultores por parte de quienes deciden.
    En el caso de las agencias de publicidad, 52% de los consultados utiliza
    sus servicios, preferencia que es mayor (81%) en el grupo de empresas
    con una dotación de más de 100 empleados.
    Chicas o más grandes, todo el mundo necesita consejo y asistencia
    en materia impositiva, un rubro que cada vez consume más tiempo
    y energía por parte de los gerentes. De toda la muestra, 74% dispone
    de este servicio, y los porcentajes son muy parejos para las tres categorías
    analizadas.
    En cambio, el marketing directo y sus vericuetos, no es para todos. Apenas
    13% recurre al servicio de especialistas, porcentaje que trepa a 28% en
    el caso de las empresas relativamente más grandes.
    En consultoría de sistemas la cuestión es diferente. Casi
    la mitad de los relevados (46%) necesita de esta asesoría experta,
    y los datos son parejos en los tres segmentos. Apenas se ingresa en el
    ámbito de las redes y de los servidores, este concurso resulta
    indispensable.
    Una señal de la complejidad de los tiempos o de la creciente prudencia
    de los empresarios se revela en este dato: 77% del universo consultado
    utiliza los servicios de estudios de abogados.
    En cambio la investigación de mercado, o indagar sobre hábitos
    y comportamientos de los clientes es una actividad todavía menos
    demandada. Solamente 25% de respuestas positivas para el conjunto, aunque
    sube a 54% en las empresas con más de 100 empleados.
    Algo similar ocurre con asesoramiento externo en materia de recursos humanos
    y de logística. En el primer caso, lo utiliza 42% del total (65%
    entre las más grandes). En el segundo, 28% (y 42%, respectivamente).

    En el campo de los servicios financieros, los que tienen contratados seguros
    generales ascienden en promedio a 84% ( 67%, 88% y 95% para cada categoría.
    Los que utilizan distintos servicios ofrecidos por los bancos, llegan
    a 78% (58%, 91%, y 86%, respectivamente). Está claro que los bancos
    tienen oportunidad de crecer entre las empresas más chicas, a poco
    que se lo propongan seriamente.
    De la muestra utilizada, los bancos con los que más frecuencia
    se trabaja son: Banco Río, 30%; Banco Francés; 26%; Banco
    de la Nación, 21%; Bank of Boston, 21%; y Citicorp, 18%.
    El uso de tarjeta de crédito corporativa no está muy extendido:
    apenas 38% de la muestra, aunque el indicador asciende a 65% entre las
    más grandes.

    Los que
    orientan
    y los que decidan

    Como era fácil presumir, el papel del gerente general como orientador
    de las compras pero especialmente como aquel que toma la decisión
    final, es realmente protagónico, en especial entre las empresas
    de menor tamaño relativo para casi todos los rubros.
    La sorpresa la proporciona el discreto gerente administrativo, quien interviene
    casi siempre en la orientación de la mayoría de los rubros
    analizados, y en cuyas manos reside, muchas veces, la decisión
    final.
    Sobre rubros específicos que tienen que ver con su campo de acción,
    es más relevante la actuación del gerente de sistemas, del
    gerente de ventas y del gerente de marketing, especialmente entre las
    empresas de mayor porte, con una estructura de decisiones más descentralizada.
    En el caso del gerente general, juega un papel central cuando se trata
    de contratar estudios de abogados, adquirir vehículos, equipos
    de telecomunicaciones y celulares, agencia de publicidad y la contratación
    de servicios financieros. Es menos destacable en la contratación
    de otro tipo de asesorías y consultores; y definitivamente menor
    cuando se trata de equipos de computación, servicios de marketing
    directo o de logística.

    El papel
    del gerente administrativo es determinante cuando se trata de resolver
    sobre la consultoría impositiva, y sobre la contratación
    de servicios financieros. Tiene menor capacidad de decisión final
    en otros rubros, pero es obvio que está involucrado en el proceso
    de decisión de casi todos los items sobre los cuales versó
    el relevamiento.
    Su influencia casi se desvanece cuando se trata de optar por la contratación
    de una agencia de publicidad, de servicios de marketing directo o de investigación
    de mercado.

    Es entre
    las empresas de mayor tamaño relativo donde es más frecuente
    la presencia del gerente de sistemas. Influye especialmente en la adquisición
    de productos informáticos y en la contratación de consultora
    de sistemas. También en materia de equipos o servicios de telecomunicaciones,
    compra de computadoras portátiles, y en menor medida, en telefonía
    celular.

    Como era
    previsible, la mayor intervención del gerente comercial se da en
    rubros como contratación de agencia de publicidad, servicios de
    marketing directo o de investigación de mercado. La presencia del
    gerente de compras solo es visible en las empresas de mayor tamaño
    y complejidad, y su influencia alcanza a los servicios de logística,
    consultoría de exportación, y servicios de telecomunicaciones.
    La gerencia de recursos humanos es más visible entre las empresas
    grandes, y su esfera de influencia comprende rubros como capacitación
    de personal –interna y externa–, consultora de recursos humanos,
    servicios de medicina prepaga, y de tickets para restaurantes y supermercados.
    En lo que se refiere al gerente de marketing, cuando existe el cargo,
    su papel es decisivo en la contratación de servicios de marketing
    directo, de agencias de publicidad, y de investigación de mercado.
    El gerente de producción, que aparece entre las empresas mayores,
    solamente tiene influencia en la contratación de servicios logísticos.

    La información
    recogida es rica para el análisis de los equipos de venta y de
    marketing en todos los rubros considerados. El año próximo,
    la nueva versión tratará de cubrir otros productos y servicios