Esto parece un juego de siglas difìciles de retener. En realidad, KVAM se ha unido a Fidely en una “revuelta de accionistas”. Según un correo electrónico enviado a los principales medios especializados de la Unión Europea y Estados Unidos, la suma ofrecida (equivale a US$ 8.900 millones”) “se halla muy por debajo de los valores de mercado”
La empresa holandesa VNU es propietaria del servicio de calificaciones televisuales Nielsen y la revista de espectáculos “Billboard”. Horas antes de la rebelión armada por KVAM y Fidelity, la firma había aceptado la propuesta de KKR. Por ende, esto crea una situación tan espinosa como poco frecuente.
Los potenciales adquirentes ofrecían € 28,75 por acciòn, algo por encima de la gama 28/28,50 planteada en enero (sin opositores en ese momento). Ahora, al trascender la revuelta, el papel cedió a € 27,35 en Amsterdam, donde cunden dudas sobre el desenlace del asunto.
“Ningún acuerdo es posible si dos de los tres accionistas mayores no aceptan la propuesta de compra”, señalaba Alexander van Oort, analista de van Lansschot Bankiers (Holanda). El martes, Fidelity International (15% de VNU) ya se manifestaba renuente a apoyar la oferta KKR. Por otra parte, las condiciones de la transacción requieren que 95% de accionistas la aprueben.
Eso pone en tela de juicio la actitud de la compañía, que aceptó la oferta sin tener en cuenta la opinión de accionistas decisivos. En lo tocante a la operación en sí, VNU quedó expuesta a tomas luego de que KVAM, Fidelity y Templeton Global Advisors la obligaran a abandonar una oferta de US$ para comprar IMS Health, en noviembre.
A criterio de analistas independientes, si VNU hubiese absorbido IMS se habría convertido en una “ensalada de rubros sin nexo entre sí, muy difícil de manejar en forma unitaria”. En cuanto al precio propuesto por KKR, los mismos expertos lo califican de “bastante alto por una encuestadora de TV y una revista de espectáculos, dos activos volátiles”.
Esto parece un juego de siglas difìciles de retener. En realidad, KVAM se ha unido a Fidely en una “revuelta de accionistas”. Según un correo electrónico enviado a los principales medios especializados de la Unión Europea y Estados Unidos, la suma ofrecida (equivale a US$ 8.900 millones”) “se halla muy por debajo de los valores de mercado”
La empresa holandesa VNU es propietaria del servicio de calificaciones televisuales Nielsen y la revista de espectáculos “Billboard”. Horas antes de la rebelión armada por KVAM y Fidelity, la firma había aceptado la propuesta de KKR. Por ende, esto crea una situación tan espinosa como poco frecuente.
Los potenciales adquirentes ofrecían € 28,75 por acciòn, algo por encima de la gama 28/28,50 planteada en enero (sin opositores en ese momento). Ahora, al trascender la revuelta, el papel cedió a € 27,35 en Amsterdam, donde cunden dudas sobre el desenlace del asunto.
“Ningún acuerdo es posible si dos de los tres accionistas mayores no aceptan la propuesta de compra”, señalaba Alexander van Oort, analista de van Lansschot Bankiers (Holanda). El martes, Fidelity International (15% de VNU) ya se manifestaba renuente a apoyar la oferta KKR. Por otra parte, las condiciones de la transacción requieren que 95% de accionistas la aprueben.
Eso pone en tela de juicio la actitud de la compañía, que aceptó la oferta sin tener en cuenta la opinión de accionistas decisivos. En lo tocante a la operación en sí, VNU quedó expuesta a tomas luego de que KVAM, Fidelity y Templeton Global Advisors la obligaran a abandonar una oferta de US$ para comprar IMS Health, en noviembre.
A criterio de analistas independientes, si VNU hubiese absorbido IMS se habría convertido en una “ensalada de rubros sin nexo entre sí, muy difícil de manejar en forma unitaria”. En cuanto al precio propuesto por KKR, los mismos expertos lo califican de “bastante alto por una encuestadora de TV y una revista de espectáculos, dos activos volátiles”.