Es la primera vez que ocurre tal cosa en la era de Internet, al menos en semejante escala y contra un grupo tecnológicamente tan avanzado.
A primera vista, el daño afectó esencialmente al sistema de voto, que involucra unos cinco mil accionistas, apoderados o representantes. Además, fue un escenario borrascoso para el CEO Jean-Marie Messier y su estrategia, que transformó una compañía de aguas corrientes y obras sanitarias -fundada en 1853- en rival de AOL Time Warner, pero a costa de un endeudamiento superior a US$ 50.000 millones. Amén de accionistas irritados, una “barra brava” (gente de Canal Plus, cuyo presidente acaban de echar) le decía de todo a Messier.
“Este intruso virtual no pudo haber aparecido en peor momento para la compañía y su conducción”, opinaron dos o tres influyentes fondos de inversión, antes de recomendar a sus clientes vender acciones de Vivendi.
Por supuesto, ello inició una baja en la bolsa de París que podría seguir el lunes. No obstante, Messier no parecía muy preocupado: la segunda convocatoria le dará más tiempo para persuadir a accionistas indecisos para aceptar propuesta rechazadas el 24. En particular, una que autorizaría al directorio a ofrecer opciones por hasta 5% del paquete Vivendi. Este detalle creaba anoche sospechas sobre a quién respondería el aún misterioso hacker.
Es la primera vez que ocurre tal cosa en la era de Internet, al menos en semejante escala y contra un grupo tecnológicamente tan avanzado.
A primera vista, el daño afectó esencialmente al sistema de voto, que involucra unos cinco mil accionistas, apoderados o representantes. Además, fue un escenario borrascoso para el CEO Jean-Marie Messier y su estrategia, que transformó una compañía de aguas corrientes y obras sanitarias -fundada en 1853- en rival de AOL Time Warner, pero a costa de un endeudamiento superior a US$ 50.000 millones. Amén de accionistas irritados, una “barra brava” (gente de Canal Plus, cuyo presidente acaban de echar) le decía de todo a Messier.
“Este intruso virtual no pudo haber aparecido en peor momento para la compañía y su conducción”, opinaron dos o tres influyentes fondos de inversión, antes de recomendar a sus clientes vender acciones de Vivendi.
Por supuesto, ello inició una baja en la bolsa de París que podría seguir el lunes. No obstante, Messier no parecía muy preocupado: la segunda convocatoria le dará más tiempo para persuadir a accionistas indecisos para aceptar propuesta rechazadas el 24. En particular, una que autorizaría al directorio a ofrecer opciones por hasta 5% del paquete Vivendi. Este detalle creaba anoche sospechas sobre a quién respondería el aún misterioso hacker.