Hay un detalle poco común: este norteamericano de 45 años fundó la empresa en 1993 y la llevó a un valor bursátil de US$ 30.000 millones antes del desastre.
Pero eso se hizo humo en pocos meses, mientras Knapp compraba activos alegremente y generaba deudas por un total de US$ 17.500 millones sin producir utilidades.
Ante esta situación, quienes poseen bonos de NTL exigirán la dimisión de Knapp como parte de un acuerdo para capitalizar deuda en acciones y tomar el control de la empresa.
Knapp y su segundo, John Gregg, son responsables por US$ 12.800 millones en pérdidas, sufridas en apenas un trimestre (octubre a diciembre de 2001). Motivo: depreciaron el valor contable de adquisiciones por US$ 11.600 millones.
Hay un detalle poco común: este norteamericano de 45 años fundó la empresa en 1993 y la llevó a un valor bursátil de US$ 30.000 millones antes del desastre.
Pero eso se hizo humo en pocos meses, mientras Knapp compraba activos alegremente y generaba deudas por un total de US$ 17.500 millones sin producir utilidades.
Ante esta situación, quienes poseen bonos de NTL exigirán la dimisión de Knapp como parte de un acuerdo para capitalizar deuda en acciones y tomar el control de la empresa.
Knapp y su segundo, John Gregg, son responsables por US$ 12.800 millones en pérdidas, sufridas en apenas un trimestre (octubre a diciembre de 2001). Motivo: depreciaron el valor contable de adquisiciones por US$ 11.600 millones.