La actividad vinculada al cultivo de nuez pecán enfrenta desafíos que han motivado a los productores a reclamar mecanismos de financiamiento específicos. La demanda responde a la necesidad de sostener el desarrollo económico y garantizar la continuidad en un sector considerado una alternativa dentro del ámbito agropecuario.
La nuez pecán, reconocida por su potencial en el mercado agrícola, requiere inversiones que aseguren su viabilidad productiva. Los productores han expresado que, si bien existe una valoración positiva sobre el cultivo, la realidad económica impone la búsqueda de soluciones concretas para mantener el negocio. En este sentido, la disponibilidad de instrumentos financieros se vuelve fundamental para acceder a recursos y afrontar los desafíos de la industria.
La solicitud por parte de los productores apunta a generar condiciones que faciliten la inversión y favorezcan el crecimiento del sector. El objetivo central es lograr que la actividad del pecán permanezca sustentable en el tiempo, consolidando su posición en el mercado y permitiendo la incorporación de nuevos actores.
Uno de los testimonios recogidos señala: “Más allá de que estamos enamorados del cultivo, esto no deja de ser un negocio”. La frase sintetiza el compromiso de los involucrados con la producción, pero también la necesidad de abordar la gestión empresarial desde una perspectiva pragmática.
La demanda de financiamiento pone en evidencia la importancia de diseñar políticas y herramientas que permitan fortalecer el sector, generando oportunidades para su desarrollo sostenible, según expresaron los productores.












