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<p>Renault hace punta esta semana en el salón de Francfort con cuatro modelos orientados al mercado masivo. Todos funcionarán con baterías recargables y gastarán en euros casi igual que los nafteros. Curiosamente, será Nissan quien primero salga a la venta, en octubre de 2010, y Renault recién lo hará en 2011 al mercado europeo.<br />
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El envite es riesgoso y en Tokio sostienen que Ghosn se equivoca. Si bien Mitsubishi Motors también promete un auto eléctrico, para Estados Unidos-Canadá, Toyota Motor y Honda Motors estiman que las baterías son todavía muy caras y la recarga demora. <br />
En vez, ambas firmas optan por versiones paulatinamente más eléctricas de autos híbridos. De ese modo, Toyota proyecta sacar un híbrido que podrá enchufarse para recarga. A juicio de Honda, los vehículos mixtos predominarán en el corto y el mediano plazo.<br />
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No obstante, Ghosn –que maneja Nissan-Renault desde 1999- piensa de otra manera y ya lleva invertidos unos € 4.000 millones. La alianza declara ventas por unos € 100.000 millones en 2008. Vale decir, sólo la supera Toyota, pues General Motors acaba de achicarse en volumen y producción.<br />
Pero la doble empresa no ha fijado precios para ninguna de ambas marcas, aunque insiste en que no serán superiores a los de unidades nafteras. La clave reside en que los usuarios no compren las baterías, sino que las alquilen. Por ejemplo, los Renault tendrán baterías desmontables que saldrán unos cien euros mensuales. Ademán, existe subsidios, como los US$ 1.600 millones que Washington otorgó a Nissan para fabricar baterías en Tennesee.</p>
<p>Ghosn calcula que los eléctricos eventualmente tendrán más mercado que los híbridos y, hacia 2020, representarán 10% de las ventas. El directivo se basa en que los crudos, hoy entre US$ 65 y 73 el barril, alcancen 150 el barril en moneda constante durante la segunda década del siglo (2011-20). <br />
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Nissan-Renault se juega por los coches eléctricos
El brasileño de origen libanés Carlos Ghosn, presidente ejecutivo de la alianza, apuesta su futuro a vehículos eléctricos que costarán como los convencionales. Esto involucra a Nissan Motor (Japón) y Régie Renault (Francia).