Microsoft obtuvo ayer (martes 26) la aceptación de la corte Suprema de Justicia de Estados Unidos de permitir que la compañía apele el fallo recibido del juez federal Thomas Penfield Jackson.
El tribunal supremo argumentó que el fallo antimonopólico que la obliga a dividirse en dos empresas independientes puede ser apelado por Microsoft y será escuchado en un tribunal inferior de apelaciones.
Con esta decisión, Microsoft ganó la batalla contra el Departamento de Justicia de Estados Unidos que buscaba que el fallo quedara en manos de la Corte Suprema, ya que los tribunales de apelaciones podrían ser más benévolos con la compañía.
Cabe recordar que el tribunal de apelaciones que escuchará los argumentos de los abogados de Bill Gates, ya había fallado a favor de Microsoft en dos ocasiones anteriores, por lo que se cree que el caso quedará cerrado en esta instancia, con fallo favorable a la compañía.
Asimismo, la Corte Suprema ordenó acelerar el proceso de apelaciones, tal como lo había solicitado el juez Jackson, para los casos que afecten a la ley antimonopolio de empresas de gran importancia para el público.
Microsoft obtuvo ayer (martes 26) la aceptación de la corte Suprema de Justicia de Estados Unidos de permitir que la compañía apele el fallo recibido del juez federal Thomas Penfield Jackson.
El tribunal supremo argumentó que el fallo antimonopólico que la obliga a dividirse en dos empresas independientes puede ser apelado por Microsoft y será escuchado en un tribunal inferior de apelaciones.
Con esta decisión, Microsoft ganó la batalla contra el Departamento de Justicia de Estados Unidos que buscaba que el fallo quedara en manos de la Corte Suprema, ya que los tribunales de apelaciones podrían ser más benévolos con la compañía.
Cabe recordar que el tribunal de apelaciones que escuchará los argumentos de los abogados de Bill Gates, ya había fallado a favor de Microsoft en dos ocasiones anteriores, por lo que se cree que el caso quedará cerrado en esta instancia, con fallo favorable a la compañía.
Asimismo, la Corte Suprema ordenó acelerar el proceso de apelaciones, tal como lo había solicitado el juez Jackson, para los casos que afecten a la ley antimonopolio de empresas de gran importancia para el público.
