<p>Rattner y la fuerza de tareas convocada por Barack Obama siguen evaluando propuestas de General Motors y Chrysler (Cerberus Capital Management). Antes del 31 del mes deben aconsejar: nuevas inyecciones o una bancarrota negociada, especialmente en el caso GM. </p>
<p>Hasta ahora, las dos empresas recibieron asistencia federal por US$ 17.400 millones. Pero en febrero solicitaron adicionales de US$ 5.000 millones (Chrysler) y 16.600 millones (GM). En total, US$ 21.600 millones, que serían 39.000 millones añadiendo lo otorgado. </p>
<p>Ese monto “depende de que las compañías cumplan con planes que parecen por demás ambiciosos”, apunta Rattner. “El optimismo que las dos exhiben hasta podría justificar cifras superiores. No lo aseguro ni lo descarto”. En todo caso, American International Group, una aseguradora que no genera un centavo de valor agregado ya quemó US$ 170.000 millones.</p>
<p>Rattner debe fijar un plazo final para todas las partes. Eso incluye United Auto Workers –un sindicato no tan fuerte como otrora- y los tenedores de bonos emitidos por General Motors. En cuanto a Chrysler, hay dos interesados colaterales: Fiat (quiere 35% del paquete) y Daimler (retiene 19,9% del paquete).</p>
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GM y Chrysler precisan US$ 40.000 millones
Steven Rattner, asesor del Tesoro en la cuestión automotriz, teme que ambos compañías necesiten bastante más que los US$ 21.600 millones sobre el tapete. El experto lo dijo este viernes desde Nueva York por televisión.