El déficit de FT (en dólares, 22.750 millones) no sorprende por tres razones: (1) los sucesivos estados trimestrales permitían estimarlo, (2) las calificadoras también lo preveían, (3) su factor clave, una depreciación contable por € 18.200 millones, tampoco era un secreto. No obstante, al combinarse con los pésimos balances de DB, DT, Telefónica de España, Fiat, KPNQwest, MobilCom y otras, despierta serias preocupaciones.
En particular, las agencias calificadoras Moody’s Investors Service, Standard & Poor’s y Fitch han anticipado que, en adelante, adoptarán políticas más restrictivas y tendrán presente la imagen del sector donde actúen las firmas examinadas. En rigor, ya estaban procediendo así al revisar los trimestrales cerrado en diciembre.
La primera fue Fitch, que asesora a fondos de cobertura y riesgo, o sea la franja más volátil de la especulación internacional con bonos de deuda y otros valores. Ahora, S&P y Moody´s “filtran” las revisiones europeas por un doble cedazo: la larga crisis en la vanguardia tecnológica (telecomunicaciones inclusive) y la crisis en banca y seguro. En efecto, si hay guerra, las primas aumentarán, pero también los riesgos y las indemnizaciones de toda clase.
El déficit de FT (en dólares, 22.750 millones) no sorprende por tres razones: (1) los sucesivos estados trimestrales permitían estimarlo, (2) las calificadoras también lo preveían, (3) su factor clave, una depreciación contable por € 18.200 millones, tampoco era un secreto. No obstante, al combinarse con los pésimos balances de DB, DT, Telefónica de España, Fiat, KPNQwest, MobilCom y otras, despierta serias preocupaciones.
En particular, las agencias calificadoras Moody’s Investors Service, Standard & Poor’s y Fitch han anticipado que, en adelante, adoptarán políticas más restrictivas y tendrán presente la imagen del sector donde actúen las firmas examinadas. En rigor, ya estaban procediendo así al revisar los trimestrales cerrado en diciembre.
La primera fue Fitch, que asesora a fondos de cobertura y riesgo, o sea la franja más volátil de la especulación internacional con bonos de deuda y otros valores. Ahora, S&P y Moody´s “filtran” las revisiones europeas por un doble cedazo: la larga crisis en la vanguardia tecnológica (telecomunicaciones inclusive) y la crisis en banca y seguro. En efecto, si hay guerra, las primas aumentarán, pero también los riesgos y las indemnizaciones de toda clase.