Aquí no ha pasado nada, fue la sensación que intentaron dejar en claro ayer el candidato presidencial del Partido Justicialista (PJ), Eduardo Duhalde, y el flamante gobernador electo de Santa Fe, Carlos Reutemann. Un almuerzo junto a empresarios mendocinos fue la excusa ideal para que el gobernador bonaerense y el ex corredor de Fórmula 1 mostraran la unidad lograda, o al menos una tregua pactada, de cara a las elecciones presidenciales del 24 de octubre. De esta forma, Duhalde pudo aquietar en parte las turbulentas aguas dentro del PJ, y enviar una señal de unidad interna necesaria para su estrategia electoral, cuando se encuentra a más de 10 puntos del candidato de la Alianza, Fernando de la Rúa, según las últimas encuestas. Y no sólo se trató de gestos, sino que también hubo lugar para frases tranquilizadoras para las aspiraciones de Duhalde: “No tengo ninguna diferencia con Duhalde, y si es conveniente acompañarlo, lo voy a hacer con mucho gusto en Santa Fe, y si es necesario, también en el resto del interior”, afirmó Reutemann.
(Clarín, La Nación)
Aquí no ha pasado nada, fue la sensación que intentaron dejar en claro ayer el candidato presidencial del Partido Justicialista (PJ), Eduardo Duhalde, y el flamante gobernador electo de Santa Fe, Carlos Reutemann. Un almuerzo junto a empresarios mendocinos fue la excusa ideal para que el gobernador bonaerense y el ex corredor de Fórmula 1 mostraran la unidad lograda, o al menos una tregua pactada, de cara a las elecciones presidenciales del 24 de octubre. De esta forma, Duhalde pudo aquietar en parte las turbulentas aguas dentro del PJ, y enviar una señal de unidad interna necesaria para su estrategia electoral, cuando se encuentra a más de 10 puntos del candidato de la Alianza, Fernando de la Rúa, según las últimas encuestas. Y no sólo se trató de gestos, sino que también hubo lugar para frases tranquilizadoras para las aspiraciones de Duhalde: “No tengo ninguna diferencia con Duhalde, y si es conveniente acompañarlo, lo voy a hacer con mucho gusto en Santa Fe, y si es necesario, también en el resto del interior”, afirmó Reutemann.
(Clarín, La Nación)