Pero, como sucedía en ese caso, analistas independientes no creen que el valor de la empresa sea hoy superior a los US$ 8.000 millones. Hasta podría ser la mitad, si al cese de pagos sucediera la apertura de concurso de acuerdo con el título XI de la ley federal de quiebras.
Esta salida parece ahora más probable, porque ayer el fondo jubilatorio del personal que trabaja para el estado de Nueva York inició acciones judiciales contra WorldCom y el estudio Arthur Andersen. Reclaman por pérdidas de “sólo” US$ 300 millones en inversiones accionarias. Pero esta demanda bien pudiera ser la primera de varias.
Pero, como sucedía en ese caso, analistas independientes no creen que el valor de la empresa sea hoy superior a los US$ 8.000 millones. Hasta podría ser la mitad, si al cese de pagos sucediera la apertura de concurso de acuerdo con el título XI de la ley federal de quiebras.
Esta salida parece ahora más probable, porque ayer el fondo jubilatorio del personal que trabaja para el estado de Nueva York inició acciones judiciales contra WorldCom y el estudio Arthur Andersen. Reclaman por pérdidas de “sólo” US$ 300 millones en inversiones accionarias. Pero esta demanda bien pudiera ser la primera de varias.