Por supuesto, el informe de la fuente, IATA, señalaba claramente que el
servicio aerocomercial y la industria aeroespacial continuaban en terapia. En
conjunto, las 280 compañías que representa la entidad perdieron
alrededor de US$ 5.600 millones durante la primera mitad del año.
Por su parte, las aerolíneas estadounidenses afrontan ahora un problema
adicional: la obsesión de Washington por la “seguridad ostensible”.
O sea, las visas de tránsito.
Desde hace varios días, las empresas afrontan crecientes devoluciones
de pasajes. “La gente se niega a abonar un costoso visado sólo por
escalas técnicas, aunque no desembarque. Y tiene toda la razón”,
coinciden voceros de las cinco mayores líneas del país. “El
pasajero empieza a preferir empresas que no pasen por nuestros aeropuertos y
eso nos perjudica”.
Por supuesto, el informe de la fuente, IATA, señalaba claramente que el
servicio aerocomercial y la industria aeroespacial continuaban en terapia. En
conjunto, las 280 compañías que representa la entidad perdieron
alrededor de US$ 5.600 millones durante la primera mitad del año.
Por su parte, las aerolíneas estadounidenses afrontan ahora un problema
adicional: la obsesión de Washington por la “seguridad ostensible”.
O sea, las visas de tránsito.
Desde hace varios días, las empresas afrontan crecientes devoluciones
de pasajes. “La gente se niega a abonar un costoso visado sólo por
escalas técnicas, aunque no desembarque. Y tiene toda la razón”,
coinciden voceros de las cinco mayores líneas del país. “El
pasajero empieza a preferir empresas que no pasen por nuestros aeropuertos y
eso nos perjudica”.