El jefe del gobierno español, José María Aznar, le garantizó al jefe de Gabinete de la Argentina, Rodolfo Terragno, que no permitirá que Aerolíneas Argentinas y su subsidiaria Austral quiebren y que el salvataje de las empresas no incluirá despidos de empleados.
Aznar y Terragno se reunieron ayer en Madrid para conversar sobre la cuestión. El estado español es uno de los principales accionistas y el operador de esas líneas aéreas.
Ambos funcionarios acordaron que los gobiernos argentino y español harán los aportes de capital necesarios para combatir la crisis de las empresas.
La promesa de Aznar fue bien recibida por Terragno, quien había manifestado que el Estado argentino no iba a invertir capital en un proyecto de despidos y desmantelamiento de ambas líneas aéreas.
El aporte de capital que el gobierno debe realizar, proporcional a su participación accionaria, de 5%, fue aceptado bajo la condición de que forme parte de un proyecto de saneamiento que permita que Aerolíneas realice asociaciones estratégicas y fusiones convenientes.
Hoy, el ministro de economía, José Luis Machinea, pidió al gobierno de España que tenga en cuenta la realidad social de la Argentina a la hora de aplicar el plan previsto por la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi, el organismo estatal español que es formalmente el accionista y operador) para sanear Aerolíneas y Austral.
El ministro señaló también que el gobierno argentino se encuentra entre las posiciones de la Sepi, que le pide cancelar los permisos de explotación, y las operadoras estadounidenses, que quieren que la Argentina abra por completo sus rutas aéreas.
De todos modos, tanto Aznar como Terragno dejaron en claro que la situación de Aerolíneas y Austral no puede afectar las relaciones económicas que mantienen ambos países.
Ver más información en “Aerolíneas: propuesta de los gremios”, en esta misma sección.
El jefe del gobierno español, José María Aznar, le garantizó al jefe de Gabinete de la Argentina, Rodolfo Terragno, que no permitirá que Aerolíneas Argentinas y su subsidiaria Austral quiebren y que el salvataje de las empresas no incluirá despidos de empleados.
Aznar y Terragno se reunieron ayer en Madrid para conversar sobre la cuestión. El estado español es uno de los principales accionistas y el operador de esas líneas aéreas.
Ambos funcionarios acordaron que los gobiernos argentino y español harán los aportes de capital necesarios para combatir la crisis de las empresas.
La promesa de Aznar fue bien recibida por Terragno, quien había manifestado que el Estado argentino no iba a invertir capital en un proyecto de despidos y desmantelamiento de ambas líneas aéreas.
El aporte de capital que el gobierno debe realizar, proporcional a su participación accionaria, de 5%, fue aceptado bajo la condición de que forme parte de un proyecto de saneamiento que permita que Aerolíneas realice asociaciones estratégicas y fusiones convenientes.
Hoy, el ministro de economía, José Luis Machinea, pidió al gobierno de España que tenga en cuenta la realidad social de la Argentina a la hora de aplicar el plan previsto por la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi, el organismo estatal español que es formalmente el accionista y operador) para sanear Aerolíneas y Austral.
El ministro señaló también que el gobierno argentino se encuentra entre las posiciones de la Sepi, que le pide cancelar los permisos de explotación, y las operadoras estadounidenses, que quieren que la Argentina abra por completo sus rutas aéreas.
De todos modos, tanto Aznar como Terragno dejaron en claro que la situación de Aerolíneas y Austral no puede afectar las relaciones económicas que mantienen ambos países.
Ver más información en “Aerolíneas: propuesta de los gremios”, en esta misma sección.