(EFE).- Los casi ocho meses del alzamiento palestino contra la ocupación israelí afectan duramente a la industria turística en Tierra Santa, hasta el punto de que la aerolínea estatal de Israel, El Al, se ha visto obligada a eliminar 500 puestos de trabajo para evitar una pérdida de US$ 50 millones.
Así lo anunció ayer (jueves 17), uno de sus portavoces, quien agregó que la compañía pretende reducir también el número de aeronaves de su flota, dejando inoperables unos cinco aviones, “medida que obliga a reducir la plantilla en todos los sectores”.
Desde que comenzó el levantamiento palestino en Cisjordania y Gaza a finales de septiembre, la industria más afectada en Israel ha sido la turística, una de las principales fuentes de ingresos del país, que ha sufrido pérdidas de 50% en distintos sectores durante los seis primeros meses de Intifada.
“Hablamos de la posibilidad de despedir hacia finales de año a unos 500 trabajadores de los 3.400 que tenemos por la crítica situación geopolítica que vivimos”, dijo el portavoz.
La compañía aérea dejará fuera de circulación a toda su flota de aviones 747-200 y en los próximos días anunciará las únicas siete rutas que mantendrá como parte de sus medidas de ajuste económico.
El Al dio a conocer hace un mes su plan de recorte salarial, debido a la situación creada por la falta de demanda de billetes, ya que decenas de miles de peregrinos y turistas cancelaron sus viajes.
La compañía israelí perdió más de US$ 100 millones el año pasado, déficit agravado por el aumento de los combustibles y la competencia de aerolíneas extranjeras y de los vuelos chárter.
(EFE).- Los casi ocho meses del alzamiento palestino contra la ocupación israelí afectan duramente a la industria turística en Tierra Santa, hasta el punto de que la aerolínea estatal de Israel, El Al, se ha visto obligada a eliminar 500 puestos de trabajo para evitar una pérdida de US$ 50 millones.
Así lo anunció ayer (jueves 17), uno de sus portavoces, quien agregó que la compañía pretende reducir también el número de aeronaves de su flota, dejando inoperables unos cinco aviones, “medida que obliga a reducir la plantilla en todos los sectores”.
Desde que comenzó el levantamiento palestino en Cisjordania y Gaza a finales de septiembre, la industria más afectada en Israel ha sido la turística, una de las principales fuentes de ingresos del país, que ha sufrido pérdidas de 50% en distintos sectores durante los seis primeros meses de Intifada.
“Hablamos de la posibilidad de despedir hacia finales de año a unos 500 trabajadores de los 3.400 que tenemos por la crítica situación geopolítica que vivimos”, dijo el portavoz.
La compañía aérea dejará fuera de circulación a toda su flota de aviones 747-200 y en los próximos días anunciará las únicas siete rutas que mantendrá como parte de sus medidas de ajuste económico.
El Al dio a conocer hace un mes su plan de recorte salarial, debido a la situación creada por la falta de demanda de billetes, ya que decenas de miles de peregrinos y turistas cancelaron sus viajes.
La compañía israelí perdió más de US$ 100 millones el año pasado, déficit agravado por el aumento de los combustibles y la competencia de aerolíneas extranjeras y de los vuelos chárter.