Según la autoridad judicial, el ex CEO y sus hijos (Timothy, ex director financiero;
Michael, ex vicepresidente operativo) “pasaron a saco la compañía de servicios
de TV por cable”. El trío y sus cómplices ocultaron deudas por más US$ 2.500
millones, entre ellas las incurridas vía gastos personales y familiares.
Por otra parte, usaban ilegalmente fondos de la empresa para darse un tren
de vida fastuoso y, en el proceso, tampoco pagaban impuestos. “Los Rigas trataron
a la firma como si fuese una simple alcancía”, había alegado la acusación. “Estos
cargos figuran entre lo más duro, elaborado y amplio de la jurisprudencia estadounidense.
Los incoados echaron mano a los trucos contables y las maniobras más complejas
en materia de fraude”, comentaba James Corney, fiscal a cargo de la causa.
Según la autoridad judicial, el ex CEO y sus hijos (Timothy, ex director financiero;
Michael, ex vicepresidente operativo) “pasaron a saco la compañía de servicios
de TV por cable”. El trío y sus cómplices ocultaron deudas por más US$ 2.500
millones, entre ellas las incurridas vía gastos personales y familiares.
Por otra parte, usaban ilegalmente fondos de la empresa para darse un tren
de vida fastuoso y, en el proceso, tampoco pagaban impuestos. “Los Rigas trataron
a la firma como si fuese una simple alcancía”, había alegado la acusación. “Estos
cargos figuran entre lo más duro, elaborado y amplio de la jurisprudencia estadounidense.
Los incoados echaron mano a los trucos contables y las maniobras más complejas
en materia de fraude”, comentaba James Corney, fiscal a cargo de la causa.