Wall Street: vacíos regulatorios fomentan choques entre banqueros
Lo serio es que el Fondo Monetario haya bajado de 2,8 a 2,2% la proyección del producto bruto interno norteamericano. Entretanto, Merrill Lynch. Morgan Stanley, Lehman Brothers y otras chican y ponen en evidencia la falta de vigilancia.
Otros factores adversos eran las dudas sobre la salud económica de Estados Unidos, la menor confianza del público y nuevas incertidumbres sobre el sector inmobiliario, con cada día más familias en bancarrota. En cuanto a Bears Stearns, Citigroup y Lehman Brothers, ML estima que sus utilidades disminuirán a causa de la iliquidez global.
Pero la guerra empezó realmente el lunes, cuando Goldman Sachs redujo sus estimaciones de ingresos para la castigada Bears Stearns, Lehman Brothers y Morgan Stanley. En otras palabras las principales bancas de inversión y firmas de valores están descalificándose entre sí, lo cual da una idea de la crisis institucional que se agrega a la hipotecaria y la financiera. Este conventilleo entre banqueros carece de precedentes en un negocio donde todos se suponían caballeros y primaba la discreción.
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Algunos analistas independientes sostienen que el mercado todavía no ha advertido cabalmente los efectos finales de estas turbulencias en la economía de EE.UU. y otros países centrales. Pero sí la percibe el FMI. Algo de eso refleja un indicador privado: según la Conference board, las expectativas de los consumidores han sufrido este mes siete puntos de recorte y quedan en 105 puntos (la mayor caída en casi dos años). Por su parte, un informe de S&P/Case –Shiller revelaba que los precios de viviendas nuevas cedieron 3,2% en el segundo trimestre. El peor retroceso en veinte años.
Otros factores adversos eran las dudas sobre la salud económica de Estados Unidos, la menor confianza del público y nuevas incertidumbres sobre el sector inmobiliario, con cada día más familias en bancarrota. En cuanto a Bears Stearns, Citigroup y Lehman Brothers, ML estima que sus utilidades disminuirán a causa de la iliquidez global.
Pero la guerra empezó realmente el lunes, cuando Goldman Sachs redujo sus estimaciones de ingresos para la castigada Bears Stearns, Lehman Brothers y Morgan Stanley. En otras palabras las principales bancas de inversión y firmas de valores están descalificándose entre sí, lo cual da una idea de la crisis institucional que se agrega a la hipotecaria y la financiera. Este conventilleo entre banqueros carece de precedentes en un negocio donde todos se suponían caballeros y primaba la discreción.
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Algunos analistas independientes sostienen que el mercado todavía no ha advertido cabalmente los efectos finales de estas turbulencias en la economía de EE.UU. y otros países centrales. Pero sí la percibe el FMI. Algo de eso refleja un indicador privado: según la Conference board, las expectativas de los consumidores han sufrido este mes siete puntos de recorte y quedan en 105 puntos (la mayor caída en casi dos años). Por su parte, un informe de S&P/Case –Shiller revelaba que los precios de viviendas nuevas cedieron 3,2% en el segundo trimestre. El peor retroceso en veinte años.
