Volatilidad petrolera amenaza una serie de proyectos alrededor del mundo
Desde Canadá hasta al Atlántico frente a Brasil, docenas de grandes emprendimientos en hidrocarburos han sido suspendidos o cancelados en pocas semanas. Las empresas tratan de ajustarse a mercados inestables o en baja.
16 diciembre, 2008
En lo inmediato, la caída de crudos beneficia a Estados Unidos y Europa occidental, cuyos habitantes están por iniciar las vacaciones posterior a fiestas. La nafta norteamericana ha cedido de un récord absoluto (US$ 1,07 el litro en julio) a 0,94 promedio.
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<p>Pero demoras y suspensiones de proyectos tienden a disminuir la oferta futura. A tal punto que varios analistas suponen que esto crea condiciones para otra alza de crudos, en cuanto las economías centrales se recobren de la crisis financiera y la recesión. Este año, por cierto, el petróleo ha atravesado sus mayores niveles y, luego, una estrepitosa caída. </p>
<p>Tras marcar pisos de US$ 39,80 el barril de WTI en Nueva York, la recesión, el menor consumo y la volatilidad mantiene los niveles de esta semana entre US$ 42 y 47. Sea como fuere, lejos de los US$ 147,50 registrados el 13 de julio. Por consiguiente, las inversiones en exploración están cortadas, pues gobiernos y empresas no pueden hacer planes para el futuro. </p>
<p>En esta fase, los cambos son como en anteriores, pero mucho más veloces. A mediados de año, se pronosticaban crudos a US$ 200 el barril. Hoy, nadie sabe a ciencia cierta si los valores reiniciarán el descenso, rebotarán o darán vueltas. La lista de proyectos demorados crece semana a semana. En Estados Unidos-Canadá se clausuran pozos, Saudiarabia suspende nuevas refinerías, igual que los emiratos del golfo e India. Brasil reconsidera su ambicioso programa “off shore”. </p>
<p>Las inversiones en fuentes renovables o alternativas, como hidroelectricidad o biocombustibles, se agotarán si los precios siguen bajas por algunos años. Como se sabe, a las grandes petroleras no las desvelan la contaminación ni el efecto invernadero en épocas de crudos baratos. </p>
<p>Otro motivo para suspender proyectos tan rápido es que costos e insumos de la industria, tras años de subir, ahora no descienden al ritmo deseable. Esto acentúa las distorsiones imperantes en el mercado. Por supuesto, gastos e inversiones inevitablemente cederán en 2009, luego de haber sumado US$ 330.000 millones en 2008. Mientras, la demanda mundial de hidrocarburos bajará por primera vez desde 1983 y, a criterio de varios expertos, los precios podrán ceder hasta US$ 30 el barril. Pero esta hipótesis no es segura: la formula Merrill Lynch apostando a una fuerte contracción en las economías china e india para 2009. </p>