Trichet desafía a Sarkozy y deja en 4% anual la tasa básica
El Banco Central europeo optó por resistir las presiones políticas francesas y no tocará el tipo referencial quizás hasta 2008, si lo hace. De todas maneras, a 4% anual sigue por debajo de su equivalente norteamericano (4,75%).
5 octubre, 2007
Jean-Claude Trichet, presidente del BCE, jamás lo dirá en público. Pero sospecha que la revalorización del euro no se debe a diferencias entre tasas, sino a algo mucho más profundo: la creciente debilidad del modelo económico norteamericano y el fracaso de las aventuras bélicas en Irak y Afganistán.
A diferencia de Estados Unidos, la Eurozona “mantiene un ritmo aceptable de crecimiento, entre 2 y 2,5% anual. No obstante –explicaba el funcionario-, se requiere cautela ante mercados volátiles, la crisis hipotecaria y la financiera”.
Justo en este momento, Deutsche Bank mandaba a pérdidas activos por € 3.100 millones, comprometidos vía una masa de títulos –dervados inclusive- respaldados en malas acreencias inmobiliarias norteamericanas. Días antes, Citigroup y Union des banques suisses castigaban sus trimestrales por iguales motivos.
Las consecuencias de la doble crisis no paran en eso. Así, Merrill Lynch acaba de despedir a dos jerárquicos, Osman Semerci y Dale Lattanzio. Eran responsables de segmentos hipotecarios de alto riesgo. La decisión del BCE hizo, el jueves, que el euro rebotase de US$1,41 a 1,414.
Jean-Claude Trichet, presidente del BCE, jamás lo dirá en público. Pero sospecha que la revalorización del euro no se debe a diferencias entre tasas, sino a algo mucho más profundo: la creciente debilidad del modelo económico norteamericano y el fracaso de las aventuras bélicas en Irak y Afganistán.
A diferencia de Estados Unidos, la Eurozona “mantiene un ritmo aceptable de crecimiento, entre 2 y 2,5% anual. No obstante –explicaba el funcionario-, se requiere cautela ante mercados volátiles, la crisis hipotecaria y la financiera”.
Justo en este momento, Deutsche Bank mandaba a pérdidas activos por € 3.100 millones, comprometidos vía una masa de títulos –dervados inclusive- respaldados en malas acreencias inmobiliarias norteamericanas. Días antes, Citigroup y Union des banques suisses castigaban sus trimestrales por iguales motivos.
Las consecuencias de la doble crisis no paran en eso. Así, Merrill Lynch acaba de despedir a dos jerárquicos, Osman Semerci y Dale Lattanzio. Eran responsables de segmentos hipotecarios de alto riesgo. La decisión del BCE hizo, el jueves, que el euro rebotase de US$1,41 a 1,414.