S&P define el panorama de los bancos
La calificadora considera que las entidades locales están en una "situación delicada" pero existen "razonables" posibilidades de que sigan operando normalmente.
La calificadora de riesgo Standard & Poor´s consideró hoy (martes 13) que los bancos locales atraviesan una “situación delicada” pero “existen razonables probabilidades de que continúen sus operaciones normalmente”. “El mayor riesgo –advirtió– continúa girando en torno a una persistente corrida de los depósitos”.
Standard & Poor´s difundió un “comentario” sobre el sistema financiero argentino, en el cual dijo que “los efectos directos del canje de deuda bajo negociación agregan nuevas presiones sobre la liquidez y rentabilidad de bancos y distorsionan sus balances”.
“El mejor escenario posible estaría dado por la mejora de la calidad crediticia del gobierno argentino, lo que podría dar lugar al crecimiento de la economía”, estimó la agencia.
En este sentido, aseveró que una recuperación económica “sólo podría suceder si se incrementa la confianza de los depositantes en el sistema financiero”.
En el análisis, la calificadora señaló que “el ambiente de estrés que rodea la reciente baja de calificación de Argentina a Default Selectivo, luego del anuncio de la reestructuración de la
deuda, es el resultado del prolongado deterioro de la situación financiera del país”.
“En este contexto, los bancos continúan en el nivel CCC+, indicando que, a pesar de encontrarse en una situación delicada, existen razonables probabilidades de que continúen sus operaciones normalmente, teniendo en cuenta que el anuncio de la reestructuración de la deuda no prevé una moratoria unilateral”, sostuvo la agencia.
Standard & Poor´s consideró que “en su tercer año de recesión, el sistema financiero argentino ha experimentado problemas de calidad de activos y de escaso financiamiento externo, habiéndose desvanecido las expectativas de una recuperación a corto plazo en vista de los recientes eventos negativos”.
En tal sentido, expresó que “hace tiempo se han cerrado las fuentes de financiamiento externo a los emisores argentinos, y la fuerte caída de depósitos ocasionando una caída de la actividad crediticia igualmente fuerte, lo que ha derivado en un mayor deterioro de la calidad de activos”.
La calificadora de riesgo Standard & Poor´s consideró hoy (martes 13) que los bancos locales atraviesan una “situación delicada” pero “existen razonables probabilidades de que continúen sus operaciones normalmente”. “El mayor riesgo –advirtió– continúa girando en torno a una persistente corrida de los depósitos”.
Standard & Poor´s difundió un “comentario” sobre el sistema financiero argentino, en el cual dijo que “los efectos directos del canje de deuda bajo negociación agregan nuevas presiones sobre la liquidez y rentabilidad de bancos y distorsionan sus balances”.
“El mejor escenario posible estaría dado por la mejora de la calidad crediticia del gobierno argentino, lo que podría dar lugar al crecimiento de la economía”, estimó la agencia.
En este sentido, aseveró que una recuperación económica “sólo podría suceder si se incrementa la confianza de los depositantes en el sistema financiero”.
En el análisis, la calificadora señaló que “el ambiente de estrés que rodea la reciente baja de calificación de Argentina a Default Selectivo, luego del anuncio de la reestructuración de la
deuda, es el resultado del prolongado deterioro de la situación financiera del país”.
“En este contexto, los bancos continúan en el nivel CCC+, indicando que, a pesar de encontrarse en una situación delicada, existen razonables probabilidades de que continúen sus operaciones normalmente, teniendo en cuenta que el anuncio de la reestructuración de la deuda no prevé una moratoria unilateral”, sostuvo la agencia.
Standard & Poor´s consideró que “en su tercer año de recesión, el sistema financiero argentino ha experimentado problemas de calidad de activos y de escaso financiamiento externo, habiéndose desvanecido las expectativas de una recuperación a corto plazo en vista de los recientes eventos negativos”.
En tal sentido, expresó que “hace tiempo se han cerrado las fuentes de financiamiento externo a los emisores argentinos, y la fuerte caída de depósitos ocasionando una caída de la actividad crediticia igualmente fuerte, lo que ha derivado en un mayor deterioro de la calidad de activos”.
