Reacción negativa del mercado brasileño
Después del abultado triunfo electoral de Inacio Lula da Silva, la Bolsa de San Pablo tuvo una fuerte caída del 4,4 por ciento y el real se depreció casi 1,5 por ciento, quedando a 3,78 unidades por dólar.
De todas maneras, la jornada transcurrió sin grandes
operaciones, como muestra de una clara actitud de prudencia por
parte de los inversores.
El real había cerrado el viernes a 3,73 unidades por dólar
luego de dos días de recuperación.
Para llevar calma, Lula salió a garantizar que durante su
gestión cumplirá con todos los compromisos externos de su país y
que, además, persistirá en combatir la inflación y mantendrá la
política de austeridad fiscal impulsada por el actual presidente
Fernando Henrique Cardoso.
“Nuestro gobierno va a honrar los compromisos, no va a
descuidar el control de la inflación y va a mantener una postura
de responsabilidad fiscal”, afirmó Lula en el primer contacto con
la prensa como presidente electo.
Apenas realizó estos anuncios, la Bolsa de San Pablo modificó
su tendencia inicial en baja, pero igualmente después volvió al
terreno negativo.
Lo mismo ocurrió con el real brasileño, que primero se apreció,
pero luego modificó la tendencia y terminó en baja, aunque en el
marco de una jornada con escasas operaciones financieras.
Por su parte, desde Washington, el secretario del Tesoro de los
Estados Unidos, Paul O´Neill, aseguró que los mercados “están
mirando con mucha atención lo que Lula hace hoy, hará mañana y la
semana próxima para mostrar que es una persona cuerda y que va a
seguir las políticas que darán estabilidad a la moneda
brasileña”.
Además, indicó que los mercados financieros esperan que el
nuevo gobierno haga frente a las deudas.
“Estoy contento de que la incertidumbre haya terminado”,
comentó el funcionario norteamericano y agregó que “creo que todo
irá muy bien”.
Asimismo, manifestó su optimismo en cuanto a que Lula
continuará con la política de su antecesor y sostuvo que “es
importante que lo haga porque esa es la llave para América
Latina”.
En tanto, el Fondo Monetario Internacional aseguró que “el
claro resultado electoral es otra afirmación de la vibrante
democracia en Brasil y ofrece al presidente electo una oportunidad
histórica para lograr las aspiraciones económicas y sociales de la
población brasileña”.
En un comunicado de prensa, el titular del organismo, Horst
Köhler, consideró que “estamos deseando trabajar con el presidente
electo y con su nuevo gobierno” para crear las “condiciones que
llevarían a un crecimiento sostenido de Brasil”.
En tal sentido, se refirió a la “estrecha relación de trabajo”
que une al Fondo con el Brasil y que incluso permitió concederle
un crédito por más de 30.500 Millones de dólares.
De todas maneras, la jornada transcurrió sin grandes
operaciones, como muestra de una clara actitud de prudencia por
parte de los inversores.
El real había cerrado el viernes a 3,73 unidades por dólar
luego de dos días de recuperación.
Para llevar calma, Lula salió a garantizar que durante su
gestión cumplirá con todos los compromisos externos de su país y
que, además, persistirá en combatir la inflación y mantendrá la
política de austeridad fiscal impulsada por el actual presidente
Fernando Henrique Cardoso.
“Nuestro gobierno va a honrar los compromisos, no va a
descuidar el control de la inflación y va a mantener una postura
de responsabilidad fiscal”, afirmó Lula en el primer contacto con
la prensa como presidente electo.
Apenas realizó estos anuncios, la Bolsa de San Pablo modificó
su tendencia inicial en baja, pero igualmente después volvió al
terreno negativo.
Lo mismo ocurrió con el real brasileño, que primero se apreció,
pero luego modificó la tendencia y terminó en baja, aunque en el
marco de una jornada con escasas operaciones financieras.
Por su parte, desde Washington, el secretario del Tesoro de los
Estados Unidos, Paul O´Neill, aseguró que los mercados “están
mirando con mucha atención lo que Lula hace hoy, hará mañana y la
semana próxima para mostrar que es una persona cuerda y que va a
seguir las políticas que darán estabilidad a la moneda
brasileña”.
Además, indicó que los mercados financieros esperan que el
nuevo gobierno haga frente a las deudas.
“Estoy contento de que la incertidumbre haya terminado”,
comentó el funcionario norteamericano y agregó que “creo que todo
irá muy bien”.
Asimismo, manifestó su optimismo en cuanto a que Lula
continuará con la política de su antecesor y sostuvo que “es
importante que lo haga porque esa es la llave para América
Latina”.
En tanto, el Fondo Monetario Internacional aseguró que “el
claro resultado electoral es otra afirmación de la vibrante
democracia en Brasil y ofrece al presidente electo una oportunidad
histórica para lograr las aspiraciones económicas y sociales de la
población brasileña”.
En un comunicado de prensa, el titular del organismo, Horst
Köhler, consideró que “estamos deseando trabajar con el presidente
electo y con su nuevo gobierno” para crear las “condiciones que
llevarían a un crecimiento sostenido de Brasil”.
En tal sentido, se refirió a la “estrecha relación de trabajo”
que une al Fondo con el Brasil y que incluso permitió concederle
un crédito por más de 30.500 Millones de dólares.
