Petrobrás invertirá US$ 2.000 millones en la Argentina

De hoy a 2007, Petróleo Brasileiro, compañía de control estatal, invertirá US$ 2.000 millones para aumentar la producción en su filial argentina. Esto forma parte de una “nueva relación” entre los socios principales del Mercosur.

23 mayo, 2003

El plan de Petrobrás incluye exploración, explotación, craqueo
y refinamiento. Es el primer programa integral después de que el gigante
brasileño comprara por US$ 1.000 millones, en octubre, la segunda petrolera
argentina, Pérez Companc SA. Según José Edoardo Dutra, CEO
de Petrobrás, las inversiones también servirán para unificar
todos los activos adquiridos en el país (plantas, estaciones de servicios,
etc.).

“Las divisiones seguirán siendo autónomas, pero en ciertas
áreas compartirán operaciones para ahorrar costos”, explicó
ayer Alberto Guimaraes, CEO de la subsidiaria en Argentina. Estas movidas, según
se comentaba en San Pablo y Nueva York, buscan aumentar la influencia regional
de Brasil y, por ende, su capacidad negociadora ante Estados Unidos.

La “nueva relación” entre los presidentes Luiz Inácio
de Silva (Lula) y Néstor Kirchner facilita las cosas y crea interés
en otros países petroleros del subcontinente (Méjico, Venezuela,
Colombia, Trinidad-Tobago). Sobre todo porque Lula acaba de crear un fondo de
US$ 1.000 millones para financiar el comercio con Argentina.

El plan de Petrobrás incluye exploración, explotación, craqueo
y refinamiento. Es el primer programa integral después de que el gigante
brasileño comprara por US$ 1.000 millones, en octubre, la segunda petrolera
argentina, Pérez Companc SA. Según José Edoardo Dutra, CEO
de Petrobrás, las inversiones también servirán para unificar
todos los activos adquiridos en el país (plantas, estaciones de servicios,
etc.).

“Las divisiones seguirán siendo autónomas, pero en ciertas
áreas compartirán operaciones para ahorrar costos”, explicó
ayer Alberto Guimaraes, CEO de la subsidiaria en Argentina. Estas movidas, según
se comentaba en San Pablo y Nueva York, buscan aumentar la influencia regional
de Brasil y, por ende, su capacidad negociadora ante Estados Unidos.

La “nueva relación” entre los presidentes Luiz Inácio
de Silva (Lula) y Néstor Kirchner facilita las cosas y crea interés
en otros países petroleros del subcontinente (Méjico, Venezuela,
Colombia, Trinidad-Tobago). Sobre todo porque Lula acaba de crear un fondo de
US$ 1.000 millones para financiar el comercio con Argentina.

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