Nuevo golpe a la OPA de Fiorani sobre AntonVeneta
Sea cual fuere la suerte de Antonio Fazio, todavía presidente de Banca dItalia, la de Giampiero Fiorani y su oferta por AntonVeneta parece echada. El sábado, también el central ordenó suspenderla.
El jueves, la doble propuesta de Banca Popolare Italiana (BPI, ex Lodi) –para quedarse con Banca Antoniana Popolare Veneta- fue suspendida por orden de la Commissione nazionale per società e borse (Consob). Ahora, igual temperamento adopta la autoridad monetaria. Como la anterior medida, afecta a la oferta pública accionaria (OPA) y su paralela oferta de canje (OPAC).
Pero, desde el sábado, se complicaba al frente judicial. Ocurre que el consejo de la magistratura examina presuntas conductas irregulares de Francesco Castellano, que encabeza el tribunal de supervisión milanés. Según evidencias, el juez tiene vínculos con Giovanni Consorte, director ejecutivo de Unipol. Es decir, el grupo que conduce la contraoferta por Banca Nazionale del Lavoro, cuyas maniobras alejaron a la oferente inicial, Banca Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA).
En lo tocante a AntonVeneta, la auditoría dispuesta sobre BPI puede ser el golpe de gracia para la OPA-OPAC de Fiorani y sus asociados. En este punto, la decisión de Banca d’Italia es clave, aunque se deba a un intento de Fazio para salvar el puesto.
Por su parte, ABN Amro no da señales de apuro por sacar las papas del fuego. Todavía con el control de la junta directiva, los holandeses pueden esperar hasta el fin de la comedia. Entre otras cosas, porque tantos manoseos están deteriorando el valor de AntonVeneta en el mercado.
Aunque la agenda formal hable de otras cosas, es obvio que la “pequeña cumbre” a reunirse el miércoles en la mansión que tiene Silvio Berlusconi de Villa Certosa (Cerdeña) se centrará en los escándalos alrededor de BNL y AntonVeneta. El primer ministro discutirá también el destino de Fazio con el vicejefe de gobierno, Giulio Tremonti, y Umberto Bossi –liga norte-, segunda cabeza de la coalición derechista.
El jueves, la doble propuesta de Banca Popolare Italiana (BPI, ex Lodi) –para quedarse con Banca Antoniana Popolare Veneta- fue suspendida por orden de la Commissione nazionale per società e borse (Consob). Ahora, igual temperamento adopta la autoridad monetaria. Como la anterior medida, afecta a la oferta pública accionaria (OPA) y su paralela oferta de canje (OPAC).
Pero, desde el sábado, se complicaba al frente judicial. Ocurre que el consejo de la magistratura examina presuntas conductas irregulares de Francesco Castellano, que encabeza el tribunal de supervisión milanés. Según evidencias, el juez tiene vínculos con Giovanni Consorte, director ejecutivo de Unipol. Es decir, el grupo que conduce la contraoferta por Banca Nazionale del Lavoro, cuyas maniobras alejaron a la oferente inicial, Banca Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA).
En lo tocante a AntonVeneta, la auditoría dispuesta sobre BPI puede ser el golpe de gracia para la OPA-OPAC de Fiorani y sus asociados. En este punto, la decisión de Banca d’Italia es clave, aunque se deba a un intento de Fazio para salvar el puesto.
Por su parte, ABN Amro no da señales de apuro por sacar las papas del fuego. Todavía con el control de la junta directiva, los holandeses pueden esperar hasta el fin de la comedia. Entre otras cosas, porque tantos manoseos están deteriorando el valor de AntonVeneta en el mercado.
Aunque la agenda formal hable de otras cosas, es obvio que la “pequeña cumbre” a reunirse el miércoles en la mansión que tiene Silvio Berlusconi de Villa Certosa (Cerdeña) se centrará en los escándalos alrededor de BNL y AntonVeneta. El primer ministro discutirá también el destino de Fazio con el vicejefe de gobierno, Giulio Tremonti, y Umberto Bossi –liga norte-, segunda cabeza de la coalición derechista.
