Nueva York asocia tres bancas a la crisis fiscal
En semanas recientes, el procurador neoyorquino solicitó información a tres grandes entidades. Se vincula a una investigación sobre operaciones inmobiliarias durante la burbuja de 2006/08, derivadas en miles de millones de pérdidas hipotecarias.
<p>Fucionarios del fiscal estadual Eric Schneiderman también han citado a ejecutivos de Bank of America, Goldman Sachs y Morgan Stanley, revelaron personas al tanto pero aún no autorizadas a dar detalles al público de Wall Street. Las indagaciones parecen ser muy amplias.<br />
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Los pedidos del procurador general cubren múltiples aspectos, en particular operaciones conuntas de las bancas bajo escrutinio. Esos paquetes reunían miles de préstamos residenciales convertidos en títulos tóxicos que se recolocaban entre inversores como fondos jubilatorios, mutuales –los segmentos más perjudicados- y aseguradoras.<br />
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No queda claro qué tramos de semejante proceso bizantino de titulización interesa a Schneiderman. Uno de sus voceros señaló el lunes que el fiscal no hablará aún sobre la investigación, pues se halla es una fase muy temprana.<br />
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En realidad, varias causas civiles han sido ya radicadas por reguladores federales y estaduales desde que esa crisis irrumpió en 2008. Algunas ya ha generado arreglos o sanciones pecuaniarias. El caso hasta hoy más sonado (US$ 550 millones) involucra a Goldman Sachs y la Securities & Exchange Commision (SEC, comisión federal de valores).<br />
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No obstante, cuestiones más duras han sido planteadas en el ámbito privado, radicadas por inversores y otros grupos contra diversas bancas. En general, los demandantes de declaraban victimas de prácticas cuestionablas en materia de titulización. Algunos han sostenido, por ejemplo, que las entidaes financieras amontonaban, en forma de bonos, préstamos que sabían malos y engañaban a los inversores sobre calidad de activos de sustento.<br />
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Otra posibilidad en examen reside en que bancos y bancas no informaran a los aseguradores hipotecarios sobre los riesgos de los instrumentos que aceptaban cubrir contra insolvencias. Un tercer canal de investigaciones son los miles de millones en créditos extendidos por firmas de Wall Street a prestamistas hipotecarios sin escrúpulos. Así les permitían seguir otorgando fondos de mala calidad, más allá de lo permisible.<br />
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