Mercados: una semana corta, pero movida
En ese lapso, el Indec difundió datos referentes de actividad económica en enero y estimaciones del balance de pagos para el IV trimestre de 2005. A su vez, el gobierno rescindió el contrato con Aguas Argentinas.
Así se inicia el informe de Arpenn SA a sus clientes. Por el lado del mercado de capitales, se realizó la licitación de bonar V y se colocaron US$ 500 millones a una tasa de corte de 8,36%. Finalmente, se experimentaron correcciones tanto en el mercado de acciones como en el de activos de renta fija.
El martes, el gobierno anunció que, por decreto 303/06, se llevó a cabo la rescisión del contrato de concesión a Aguas Argentinas. Se argumentan incumplimientos en el servicio y riesgo para la salud pública frente a elevados niveles de nitrato en el agua. De esta manera, el estado pasará a hacerse cargo de la prestación del servicio a través de la compañía denominada Aguas y Saneamiento Argentino (AySA).
Si bien se asume como un hecho transitorio, ya se tiene preparado un plan de inversión a tres años que involucraría fondos por $ 1.300 millones. Esto echa un manto de dudas sobre la temporalidad de la reestatización. Sin los ajustes tarifarios que venía reclamando el grupo francés Suez –principal accionista–, la rentabilidad del sector es incierta. Ello lo vuelve poco atractivo para que otros inversores privados asuman la responsabilidad de llevar adelante el servicio.
De esta manera, el gobierno restatiza la cuarta empresa desde el inicio de su gestión. Las anteriores eran Correo Argentino, Thales –empresa encargada del espectro radioeléctrico–, y Metropolitano-línea San Martín. Se espera que el estado se haga cargo del déficit que genere la flamante empresa, dado que el jefe de gabinete tendrá la facultad de modificar el presupuesto para atender los requerimientos de la nueva compañía.
En cuanto a indicadores macroeconómicos, el Indec revela en enero un crecimiento anualizado de 9,1%. Cabe destacar que, en las comparaciones mensuales de la serie desestacionalizada, tanto enero como diciembre finalizaron con variación nula. Eso muestra cierta desaceleración en el ritmo expansivo. También se difundió la estimación del balance de pagos para 2005, del cual vale la pena destacar que Argentina obtuvo un superávit en cuenta corriente de US$ 5.407 millones, inclusive un saldo positivo comercial de 11.048 millones. A su vez, el año finalizó con una entrada de capitales por US$ 2.756 millones, aunque todavía se registra una salida de fondos en el sector privado financiero que ronda los 1.434 millones. Las reservas internacionales del banco central se incrementaron US$ 8.857 millones y llegaron a 28.077 millones. Finalmente, en cuanto a deuda externa, se estimó que a fin de año se ubicaba en US$ u$s 117.209 millones, una fuerte disminución anual respecto de un año antes.
Así se inicia el informe de Arpenn SA a sus clientes. Por el lado del mercado de capitales, se realizó la licitación de bonar V y se colocaron US$ 500 millones a una tasa de corte de 8,36%. Finalmente, se experimentaron correcciones tanto en el mercado de acciones como en el de activos de renta fija.
El martes, el gobierno anunció que, por decreto 303/06, se llevó a cabo la rescisión del contrato de concesión a Aguas Argentinas. Se argumentan incumplimientos en el servicio y riesgo para la salud pública frente a elevados niveles de nitrato en el agua. De esta manera, el estado pasará a hacerse cargo de la prestación del servicio a través de la compañía denominada Aguas y Saneamiento Argentino (AySA).
Si bien se asume como un hecho transitorio, ya se tiene preparado un plan de inversión a tres años que involucraría fondos por $ 1.300 millones. Esto echa un manto de dudas sobre la temporalidad de la reestatización. Sin los ajustes tarifarios que venía reclamando el grupo francés Suez –principal accionista–, la rentabilidad del sector es incierta. Ello lo vuelve poco atractivo para que otros inversores privados asuman la responsabilidad de llevar adelante el servicio.
De esta manera, el gobierno restatiza la cuarta empresa desde el inicio de su gestión. Las anteriores eran Correo Argentino, Thales –empresa encargada del espectro radioeléctrico–, y Metropolitano-línea San Martín. Se espera que el estado se haga cargo del déficit que genere la flamante empresa, dado que el jefe de gabinete tendrá la facultad de modificar el presupuesto para atender los requerimientos de la nueva compañía.
En cuanto a indicadores macroeconómicos, el Indec revela en enero un crecimiento anualizado de 9,1%. Cabe destacar que, en las comparaciones mensuales de la serie desestacionalizada, tanto enero como diciembre finalizaron con variación nula. Eso muestra cierta desaceleración en el ritmo expansivo. También se difundió la estimación del balance de pagos para 2005, del cual vale la pena destacar que Argentina obtuvo un superávit en cuenta corriente de US$ 5.407 millones, inclusive un saldo positivo comercial de 11.048 millones. A su vez, el año finalizó con una entrada de capitales por US$ 2.756 millones, aunque todavía se registra una salida de fondos en el sector privado financiero que ronda los 1.434 millones. Las reservas internacionales del banco central se incrementaron US$ 8.857 millones y llegaron a 28.077 millones. Finalmente, en cuanto a deuda externa, se estimó que a fin de año se ubicaba en US$ u$s 117.209 millones, una fuerte disminución anual respecto de un año antes.
