Los crudos sobrepasan US$ 66, vacilan las acciones tecnológicas

Wall Street apeló a maniobras habituales para frenar el descenso, ayudada por algunos mercados europeos. Pero los crudos siguen subiendo debido al caso Irán-Gran Bretaña. Mientras, surgen malas perspectivas en telefonía celular.

30 marzo, 2007

Los tejanos intermedios alcanzaron US$ 66,40 el barril en Nueva York. Esto puso en segundo plano declaraciones de Benjamin Bernanke, en cuanto a que el producto bruto interno subió 2,5% anual en octubre-diciembre, en vez de 2,2%.

Por otro ángulo, fabricantes de semiconductores para comunicaciones, como Texas Instruments o Qualcom, desataron un repliegue bursátil. Sucede que RF Micro -produce partes y componentes de telefonía móvil- pronostica menos ventas y utilidades para su primer trimestre contable (abril-junio) y lo atribuye a una contracción del mercado del cual dependen sus clientes.

En tercer lugar, el optimismo de Bernanke sobre el crecimiento este año se da de bruces con la crisis de deudores hipotecarios insolventes, originada en “préstamos predatorios”. El presidente de las Reserva Federal y su equipo insisten en minimizar los alcances del problema, pero el congresos piensa que todo puede desembocar en una serie de quiebras.

Como si todo eso fuera poco, algunos analistas sectoriales predicen petróleo a US$ 70 para principios de abril en Nueva York, si no afloja la crisis de los quince marineros británicos apresados por Irán. Los cierres de la jornada (US$ 66 el WTI, 67,50 el Brent londinense) apuntan en esa dirección.

En medio de todo, el usual grupo de “manos pesadas” logró dar vuelta Londres, Fránfort y Nueva York media hora antes de cada cierre. Por tanto, leves bajas se trocaron en leves alzas, pues la consigna –psicológica- es no terminar el mes en retroceso. Eso se notó particulamente en el Nasdaq compuesto (tecnológicas), que llegó a ceder 1% pero concluyó neutro merced a compras ordenadas por dos firmas de valores.

Los tejanos intermedios alcanzaron US$ 66,40 el barril en Nueva York. Esto puso en segundo plano declaraciones de Benjamin Bernanke, en cuanto a que el producto bruto interno subió 2,5% anual en octubre-diciembre, en vez de 2,2%.

Por otro ángulo, fabricantes de semiconductores para comunicaciones, como Texas Instruments o Qualcom, desataron un repliegue bursátil. Sucede que RF Micro -produce partes y componentes de telefonía móvil- pronostica menos ventas y utilidades para su primer trimestre contable (abril-junio) y lo atribuye a una contracción del mercado del cual dependen sus clientes.

En tercer lugar, el optimismo de Bernanke sobre el crecimiento este año se da de bruces con la crisis de deudores hipotecarios insolventes, originada en “préstamos predatorios”. El presidente de las Reserva Federal y su equipo insisten en minimizar los alcances del problema, pero el congresos piensa que todo puede desembocar en una serie de quiebras.

Como si todo eso fuera poco, algunos analistas sectoriales predicen petróleo a US$ 70 para principios de abril en Nueva York, si no afloja la crisis de los quince marineros británicos apresados por Irán. Los cierres de la jornada (US$ 66 el WTI, 67,50 el Brent londinense) apuntan en esa dirección.

En medio de todo, el usual grupo de “manos pesadas” logró dar vuelta Londres, Fránfort y Nueva York media hora antes de cada cierre. Por tanto, leves bajas se trocaron en leves alzas, pues la consigna –psicológica- es no terminar el mes en retroceso. Eso se notó particulamente en el Nasdaq compuesto (tecnológicas), que llegó a ceder 1% pero concluyó neutro merced a compras ordenadas por dos firmas de valores.

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