Las tasas no subieron
La preocupación por la fragilidad de la economía global pesó más que las pruebas de una recuperación en Estados Unidos. El Banco Central estadounidense mantuvo la tasa entre 0 y 0,25 para la tasa referencial.
Junto con el anuncio advirtió que los acontecimientos recientes en la economía global, liderados por una notable desaceleración en la economía china pueden impedir o dificultar en alguna medida el crecimiento de la actividad económica en Estados Unidos y reducir la inflación en el corto plazo.
Si bien hay algunas versiones que esperan que el primer aumento de tasas desde 2006 se produzca antes de fin de año, son más los que creen que ahora la Fed se abstendrá de tocar las tasas hasta 2016 y otros incluso hablan de 2017.
La decisión de dejar tal cual las tasas se produce a pesar de que los bancos centrales en algunos mercados emergentes de terminar con la especulación y aumentarlas de una vez. Por otro lado el FMI y el Banco Mundial eran los que le reclamaban que espere, en parte por temores sobre el impacto que el aumento tendría en la fragilidad de los mercados emergentes.
