Japón estrena sistema de pagos interbancarios
El nuevo mecanismo, que comenzó a funcionar hoy (jueves), busca prevenir problemas por retrasos en los pagos y permite a unas 700 entidades financieras realizar sus operaciones en tiempo real.
4 enero, 2001
(EFE).- El nuevo sistema de pagos interbancarios en tiempo real del Banco de Japón (BOJ) comenzó hoy (jueves 4) a funcionar sin contratiempos, informaron fuentes de banco central.
El nuevo sistema, que permitirá a unas 700 entidades financieras realizar sus pagos en los mercados del dinero y de bonos inmediatamente, pretende prevenir que la mora en los pagos de una entidad afecte a las demás en el caso de que alguna entidad suspenda pagos.
El BOJ realizó varios ensayos con el nuevo sistema el pasado diciembre para evitar errores informáticos y retuvo 500.000 millones de yenes (unos US$ 4.347 millones) en sus cuentas para prevenir posibles fallos del sistema, lo que dejó la oferta monetaria en 3,9 billones de yenes (unos US$ 33.913 millones).
Fuentes del mercado consideran que los efectos del cambio de sistema no se apreciarán hasta dentro de un mes aproximadamente, cuando los agentes interbancarios se hayan acostumbrado a él.
Algunos críticos con este sistema, implantado ya en las economías desarrolladas, consideran que obligará a las agencias de valores y bancos que participan en el sistema a tener disponibles de 200 a 400% más de fondos que antes, y que puede causar fluctuaciones repentinas más desenfrenadas que la anterior forma de ajuste de pagos.
(EFE).- El nuevo sistema de pagos interbancarios en tiempo real del Banco de Japón (BOJ) comenzó hoy (jueves 4) a funcionar sin contratiempos, informaron fuentes de banco central.
El nuevo sistema, que permitirá a unas 700 entidades financieras realizar sus pagos en los mercados del dinero y de bonos inmediatamente, pretende prevenir que la mora en los pagos de una entidad afecte a las demás en el caso de que alguna entidad suspenda pagos.
El BOJ realizó varios ensayos con el nuevo sistema el pasado diciembre para evitar errores informáticos y retuvo 500.000 millones de yenes (unos US$ 4.347 millones) en sus cuentas para prevenir posibles fallos del sistema, lo que dejó la oferta monetaria en 3,9 billones de yenes (unos US$ 33.913 millones).
Fuentes del mercado consideran que los efectos del cambio de sistema no se apreciarán hasta dentro de un mes aproximadamente, cuando los agentes interbancarios se hayan acostumbrado a él.
Algunos críticos con este sistema, implantado ya en las economías desarrolladas, consideran que obligará a las agencias de valores y bancos que participan en el sistema a tener disponibles de 200 a 400% más de fondos que antes, y que puede causar fluctuaciones repentinas más desenfrenadas que la anterior forma de ajuste de pagos.