EE.UU.: el público se endeudó por US$ 13.500 millones en marzo
La toma de crédito por parte de los norteamericanos subió en marzo al mayor ritmo desde noviembre. Son compras con tarjetas, financiamiento de automotores, etc. La proyección anual da US$ 2,43 billones (+6,7%), según la Reserva Federal.
9 mayo, 2007
El rubro se conoce como “crédito al consumo”, si bien un coche o un televisor se usan, no se consumen. En febrero, la deuda del público había crecido “apenas” US$ 5.600 millones. Estas cifras reflejan la virtual inexistencia de ahorro interno en Estados Unidos, vacío que Japón, China y otros cubren comprando bonos de la tesorería federal.
Pero los expertos detectan un nuevo fenómeno paralelo: el desinfle de valores inmobiliarios hace que parte del público se vuelque a fuentes de crédito más onerosas. Por ejemplo, las tarjetas. En otras palabras, la “adicción al consumo” está creando una masa de malos pagadores potenciales. Lo malo es el bajo desempleo y el constante estímulo mediático a endeudarse fomentan esos gastos. A su vez, éstos, aportan dos tercio al crecimiento del producto bruto interno.
El incremento en marzo aún no llega al de noviembre, que sumaba US$ 20.100 millones. Las deudas de renovación constante –tarjetas de crédito, por ejemplo- subieron US$ 6.800 millones en el tercer mes de 2007, contra apenas 2.200 millones en febrero. El endeudamiento no autorrenovable (préstamos para comprar autos y para fines inmobiliarios), pasaron de aumentar US$ 3.400 millones en febrero a 6.700 millones en marzo.
El rubro se conoce como “crédito al consumo”, si bien un coche o un televisor se usan, no se consumen. En febrero, la deuda del público había crecido “apenas” US$ 5.600 millones. Estas cifras reflejan la virtual inexistencia de ahorro interno en Estados Unidos, vacío que Japón, China y otros cubren comprando bonos de la tesorería federal.
Pero los expertos detectan un nuevo fenómeno paralelo: el desinfle de valores inmobiliarios hace que parte del público se vuelque a fuentes de crédito más onerosas. Por ejemplo, las tarjetas. En otras palabras, la “adicción al consumo” está creando una masa de malos pagadores potenciales. Lo malo es el bajo desempleo y el constante estímulo mediático a endeudarse fomentan esos gastos. A su vez, éstos, aportan dos tercio al crecimiento del producto bruto interno.
El incremento en marzo aún no llega al de noviembre, que sumaba US$ 20.100 millones. Las deudas de renovación constante –tarjetas de crédito, por ejemplo- subieron US$ 6.800 millones en el tercer mes de 2007, contra apenas 2.200 millones en febrero. El endeudamiento no autorrenovable (préstamos para comprar autos y para fines inmobiliarios), pasaron de aumentar US$ 3.400 millones en febrero a 6.700 millones en marzo.