EE.UU.: confianza del consumidor, en el mínimo desde 1993
El índice de confianza entre consumidores llegó al mínimo desde noviembre de 1993. La gente sigue preocupada por el estancamiento económico y el desempleo. Wall Street logró repuntar, pese a la pálida recepción del discurso presidencial.
El indicador de la Conference Board (cámara de industriales privados) cedió
en enero a 79 puntos, nivel idéntico al de hace nueve años y diez
meses. Curiosamente, como el pronóstico medio de sesenta analistas bursátiles
era 78,4, Wall Street repuntó poco más de 1,25%. No obstante, aquel
índice cede 2,1% respecto de los 80,7 puntos marcados en diciembre. Esta
vez, las acciones no tuvieron en cuenta que el pesimismo de los consumidores se
relaciona, también, con el alza de precios y tarifas en energía
y combustibles, operado a raíz del aumento de crudos (debido al clima bélico
en torno de Iraq, reavivado por el tono de George W.Bush en el “estado de
la Unión”).
La estadística de la CB puede influir en la conducta compradora. Hasta
el momento, por cierto, el público ha mantenido un nivel más que
aceptable de gastos, reflejado en la adquisición de viviendas nuevas y
usadas (récord en diciembre), en este caso por las bajísimas tasas
en crédito hipotecario.
También en todo 2002, con los intereses más exiguos en 40 años,
las ventas de unidades nuevas fueron récord: 1.082.000. El total estimado
para 2001, 908.000, también había sido récord. El descenso
de costos financieros inclusive neutralizó en buena parte el aumento de
precios inmobiliarios, que redondeó 3,4% en 2002.
El indicador de la Conference Board (cámara de industriales privados) cedió
en enero a 79 puntos, nivel idéntico al de hace nueve años y diez
meses. Curiosamente, como el pronóstico medio de sesenta analistas bursátiles
era 78,4, Wall Street repuntó poco más de 1,25%. No obstante, aquel
índice cede 2,1% respecto de los 80,7 puntos marcados en diciembre. Esta
vez, las acciones no tuvieron en cuenta que el pesimismo de los consumidores se
relaciona, también, con el alza de precios y tarifas en energía
y combustibles, operado a raíz del aumento de crudos (debido al clima bélico
en torno de Iraq, reavivado por el tono de George W.Bush en el “estado de
la Unión”).
La estadística de la CB puede influir en la conducta compradora. Hasta
el momento, por cierto, el público ha mantenido un nivel más que
aceptable de gastos, reflejado en la adquisición de viviendas nuevas y
usadas (récord en diciembre), en este caso por las bajísimas tasas
en crédito hipotecario.
También en todo 2002, con los intereses más exiguos en 40 años,
las ventas de unidades nuevas fueron récord: 1.082.000. El total estimado
para 2001, 908.000, también había sido récord. El descenso
de costos financieros inclusive neutralizó en buena parte el aumento de
precios inmobiliarios, que redondeó 3,4% en 2002.
