Crudos: rebotan por problemas en Rusia y ataques en Irak
Con Nueva York en feriado compensatorio, el crudo Brent nórdico rebotó en Londres, afectó algunas bolsas y llevó el euro a US$ 1,235. Motivos: graves problemas en Yukos, Rusia, y nuevos ataques a oleoductos en Irak.
En realidad, el rebote en Londres –donde el petróleo con entrega en 45 días volvía a US$ 36,30 el barril- reflejaban tendencias similares en la plaza Asia Pacífico y el mercado libre al contado en Amsterdam. Además, surgían dudas sobre si la Organización de Países Exportadores (OPEP) podrá cumplir con la promesa de elevar la producción en 500.000 barriles desde agosto.
Mientras tanto, las exportaciones por los dos terminales iraquíes en el golfo Pérsico cedieron a 960.000 b/d durante el fin de semana. Ataques y, especialmente, sabotajes habían perforado uno de los dos ductos principales. Además, un poliducto que sale al norte, vía Turquía, fue averiado por bombardeos.
En el caso ruso, el problema es muy diferente. Nuevos allanamientos a las oficinas de Yuko, quinta petrolera del mundo, se combinan con demandas judiciales en Estados Unidos. Según analistas financieros, la empresa –virtualmente estatizada- debe pagar esta semana unos US$ 3.400 millones en impuestos vencidos o, de lo contrario, pedir bancarrota (ver “economía y política”).
En realidad, el rebote en Londres –donde el petróleo con entrega en 45 días volvía a US$ 36,30 el barril- reflejaban tendencias similares en la plaza Asia Pacífico y el mercado libre al contado en Amsterdam. Además, surgían dudas sobre si la Organización de Países Exportadores (OPEP) podrá cumplir con la promesa de elevar la producción en 500.000 barriles desde agosto.
Mientras tanto, las exportaciones por los dos terminales iraquíes en el golfo Pérsico cedieron a 960.000 b/d durante el fin de semana. Ataques y, especialmente, sabotajes habían perforado uno de los dos ductos principales. Además, un poliducto que sale al norte, vía Turquía, fue averiado por bombardeos.
En el caso ruso, el problema es muy diferente. Nuevos allanamientos a las oficinas de Yuko, quinta petrolera del mundo, se combinan con demandas judiciales en Estados Unidos. Según analistas financieros, la empresa –virtualmente estatizada- debe pagar esta semana unos US$ 3.400 millones en impuestos vencidos o, de lo contrario, pedir bancarrota (ver “economía y política”).
