Caen líderes niponas y tiembla la economía
El maremoto bursátil recién empieza, pero ya sufren firmas como Honda, Sony o Toyota. El banco del Japón (central) debió inyectar un récord de US$ 184.000 millones sólo este lunes. En rueda bursátil limitada, el Nikkei en yen se desplomó 6,18%.
<p>Mientras el mercado espera mayores dosis de liquidez, la del lunes fue la más grande en una sola jornada y en valores nominales. Paralelamente, hubo “réplicas” en Seúl, Hong Kong, Shanghai, Shenzhen, Taipei, Singapur y Bombay. No obstante, la actividad industrial japonesa seguía mayormente paralizada y hay un síntoma alarmante: cayeron 24% los papeles de Tokyo Elecric Power (TecPo), operadora de las usinas nucleares dañadas o en colapso.<br />
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En realidad, observadores en Asia oriental y sudoriental califican esto de “golpe inicial”, pues el lunes los indicadores sólo volvieron al nivel de hace cuatro meses. “Queda todavía un considerable margen de retroceso. Sobrevivimos al primer impacto, pero las incertidumbres siguen siendo altas” indicaba Masaaki Shirakawa, presidente del banco central.<br />
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De hecho, la actitud realista de las autoridades monetarias contrasta con la escasa información difundida por el sector político del gobierno. Igual ocurre con las grandes compañías de servicios.<br />
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Pese a tanta reticencia, Toyota Motor –máxima empresa mundial en capitalización bursátil- se vio obligada a admitir que mantendrá suspendidas todas sus fábricas locales. Ello significa que la producción bajará en 40.000 unidades y las pérdidas diarias llegan a US$ 72 millones, por lo cual su acción perdió 7,19% el lunes. Harán falta fondos colosales para financiar la reconstrucción, igual que en Suzuki, Mitsubishi Electric, Honda, Nissan o Toshiba.<br />
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Puesto contra las cuerdas, el primer ministro Naoto Kan reconoció en la mañana del martes que “la catástrofe puede acarrear pérdidas superiores a los US$ 100.000 millones”. Las aseguradoras, por ejemplo, necesitarán unos US$ 35.000 millones. <br />
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