<p>“En definitiva a mí me paga la corporación, pero yo soy argentino y quiero que la empresa crezca acá y no en Brasil o Chile. Acá trabajo yo y cientos de personas más que son argentinos”, palabras más, palabras menos, es la constante que se escucha al promediar la charla después del planteo de los inconvenientes que hacen las altas gerencias sobre como funcionan en Argentina: inflación, tipo de cambio, trabas regulatorias, y la mar en coche…</p>
<p>Las multinacionales necesitan más que nunca ejecutivos con conocimientos y habilidades capaces de operar bajo el modelo de descentralización en el exterior para dirigir las subsidiarias o filiales de una empresa. Tienen que trabajar Localmente, pero pensando Globalmente: think global, act local.</p>
<p>Latinoamérica para muchos ha significado un master en negociación, problemática sindical y gubernamental, resolución de conflictos; un nueva realidad económica y social los ha despavilado, pero eso una vez aprendido y corporizado hay que explicarlo a nuestras casas matrices. No es tarea sencilla explicar conceptos tan diferentes en función del orden y la previsibilidad de las medidas, regulación y estabilidad económica.</p>
<p>Los cambios recientes de los negocios internacionales han revolucionado las tareas que enfrentan las primeras y segundas líneas de las empresas multinacionales; y la habilidad para desarrollar esas tareas será claramente lo que defina el futuro de esas filiales, tanto en Argentina como en el mundo. Son ellos los que tienen el contacto local y el conocimiento detallado de las actividades, de la idiosincrasia, no la casa matriz.</p>
<p>Ellos son lo que podríamos llamar los “Embajadores ocultos” del país, ya no de la marca, de la cuál esa compañía es “made in”. De ellos depende no solamente su productividad, rentabilidad y posterior reporte. De ellos depende nada menos que su continuidad… y el generar que la casa matriz no quiera ni por asomo mudarse de “barrio”.</p>
<p>Este hecho de la realidad nos lleva a pensar qué importante sería que estos mismos embajadores pudieran tener el apoyo del Estado o de un organismo de ayuda a la inversión y al desarrollo de nuevos negocios. ¿Lo tienen?</p>
<p>Lo que sí sabemos es que Latinoamérica tiene una excelente oportunidad de crecimiento. Ya sea por las distintas variables internacionales de los negocios con China, ya sea por los commodities, ya sea por las ventas de automotrices, el consumo generalizado, o el impulso a la obra pública. Pero, ¿quién los salva a la hora de reconocer ante sus casas matrices los números de la inflación, los nuevos impuestos, las trabas en la Aduana y las leyes que no salen? ¿En qué vereda se para el CEO local de una multinacional cuando tiene que administrar las presiones en un país como el nuestro?</p>
<p>Al final del día, ellos son argentinos, sufren por la Selección, les gusta el mate con bizcochitos y comen choripán y un buen asado el domingo. Lo único que los hace diferentes es que trabajan para una multinacional. No perdamos el rumbo. Al final del día, ellos son nuestros mejores embajadores, nuestros brand ambassadors…</p>
<p><br />
</p>
Los Brand Ambassadors del siglo XXI
Eduardo Reina, vicepresidente de Estudio de Comunicación, la consultora española con filial en Argentina y autor de este artículo, habla aquí de los cambios producidos en el rol que juegan los ejecutivos locales de empresas multinacionales.
