El encuentro, que se llevó a cabo en el predio ferial de La Rural, denominado Sustainable Brands Buenos Aires, contó con la presencia de medio centenar de oradores nacionales e internacionales, quienes debatieron sobre las nuevas economías y cómo construir marcas sustentables.
La inglesa Sally Uren, de la ONG Forum for the future, dijo que “las marcas tienen potencialidad para ser agentes de cambio y generar sustentabilidad”, desde la periferia al centro, porque según admitió, esta temática sigue siendo “una cuestión de nicho” ya que los gobiernos no le prestan la debida atención.
Citó a marcas de consumo masivo como Nike, que fabrica zapatillas con materiales sustentables, y que luego “crea demanda” para esos productos; Unilever, que fomenta el uso del jabón en el cuidado de la salud o la autoestima de las mujeres; Levis, que fabrica jeans con poca agua y la empresa de higiene Method, que fabrica artículos de limpieza sin productos químicos.
Por su parte, el abogado argentino Pedro Tarak, especializado en derecho ambiental, y cofundador del Sistema B, que promueve la transición hacia economías sustentables, dijo que su sueño es la conformación de una economía que “dé respuesta a los problemas sociales y ambientales, y que no genere las inequidades que luego deban tener que ser mitigadas con esfuerzo”.
Dijo que la economía actual está basada en el “yo-yo” y él procura que esté orientada al “yo-nosotros” o al “yo-tierra”, refiriéndose a la necesidad de que las empresas estén integradas y que armen una suerte de “complicidad y comunidad” con sus clientes y proveedores.
“El sentido verdadero de la política y la economía es construir dignidad”, aseguró y manifestó su deseo de que “las marcas generen soluciones para todos”.
Por su parte, la norteamericana KoAnn Skrzyniarz, fundadora de Sustainable Brands, aseguró que la economía sustentable contribuye a cambiar el paradigma de las marcas, que están en el centro del poder económico, lideran los negocios y las aspiraciones sociales.
Sostuvo que en el siglo pasado la productividad tendió a la eficiencia e hizo mal uso de los recursos naturales, “y ahora, con la sustentabilidad, las marcas tienen la posibilidad de cambiar el futuro”, aseguró.
Gabriela Korovsky, de la consultora Urban, consideró que en la actualidad “el cambio está sucediendo” en alusión a la sustentabilidad del accionar de las empresas y se mostró confiada de que “en unos años vamos a estar viviendo en la sustentabilidad y no habrá otra manera”.
Pablo Benavides, de la consultora Thinking Partner, instó a “reimaginar, rediseñar y regenerar” las marcas en su sustentabilidad en tanto que Matías Kelly, de la organización de emprendedores sociales Ashoka, citó una serie de iniciativas positivas en el mundo que abogan por la paz, como el belga que usa ratas para detectar minas terrestres, o la pareja canadiense que lleva bebés a colegios violentos para que los alumnos a través del diálogo desciendan sus niveles de agresividad.
A su turno, la uruguaya Giselle Della Mea, citó el ejemplo de un dispositivo cargado con energía solar denominado Waka Waka que es usado en situaciones de catástrofe ya sea para suministrar luz de manera económica o para cargar un celular para situaciones de emergencia. Dijo que actualmente es usado en los casos de habitantes de Siria que por cuestiones bélicas se ven obligados a abandonar su hogar y viven en campamentos improvisados.