lunes, 2 de diciembre de 2024

Las influencers también ganan menos

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En sector donde lo que se cobra se negocia los hombres negocian mejor.

Una encuesta realizada entre influencers de todo el mundo muestra que ya se ha instalado una “brecha monetaria” en las tarifas que reciben hombres y mujeres.

Las mujeres constituyen 75% del negocio de influencers según Klear, una compañía que vende software para manejar ese negocio. Pero según la investigación que realizó, las mujeres cobran menos. La encuesta internacional que realizó entre más de 250.000 influencers en Instagram, You Tube y Facebook descubrió que ellas cobran un promedio de US$ 351 por posteo, 23% menos que los US$ 459 que cobran los varones.

 

La primera explicación que surge para esta disparidad es obvia; hay mucha más competencia entre las mujeres que entre los hombres y por eso el precio baja. Los hombres, al ser un recurso más escaso, cobran más.

 

Claro que esta lógica no funcionó nunca en los negocios dominados por los hombres. Históricamente, los sectores con menos mujeres han sido los peores en igualdad de remuneración. Y hasta en sectores donde las mujeres abundan el bajo porcentaje de representación femenina en los puestos más altos crean importantes brechas salariales.

Una encuesta realizada por Glassdoor en 2019, por ejemplo, encontró que en Estados Unidos los sectores con mayor diferencia salarial eran los medios y el retail, ambos sectores donde tradicionalmente hay tantas mujeres como hombres o más.

 

Pero en el tema de los influencers hay otro elemento. Es una actividad diferente de otras que son vistas por el público. La moneda de cambio de un influencers es su personalidad y su apariencia aparte, claro está, que su número de seguidores. Aquí el género de la persona incide mucho más que en otras actividades. Podría decirse que una abogada puede practicar el derecho de la misma forma que un abogado y viceversa. Pero una influencer mujer tal vez no pueda vender espuma de afeitar para hombres ni un varón vender bikinis o labiales a adolescentes.

 

En el negocio de la influencia de ventas, los precios varían enormemente. Según Klear, quien tenga entre 500 y 5000 seguidores podría cobrar US$ 43 por una historia en Instagram, hasta US$ 315 por un video en You Tube. En el otro extremo del espectro. El video de una persona famosa podría costar hasta YS$ 3.800 en You Tube.

De todos los sectores representados , el de viajes resultó el más caro para los anunciantes, con algunos posteos de hasta US$ 5.335. Klear dice que las tarifas son por lo general fijadas por los influencers mismos o negociadas y que eso es precisamente lo que podría perjudicar a las mujeres. Por tradición, les cuesta negociar.

 

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