Sigue el éxodo: renunció el CEO de AES Corp.
Dennis W. Bakke, cofundador y CEO del grupo energético AES Corporation, dimitió anoche, mientras la firma afronta quebrantos originados en inversiones poco prudentes. En especial, latinoamericanas.
Desde 1991/2, AES intentaba sacar partido de la desordenada onda privatizadora
en el subcontinente y otros puntos de la periferia. Así, llegó
a instalar cuarenta filiales o subsidiarias. Ahora, su acción vale menos
de US$ 5, contra 70 en octubre de 2000 y 44,50 hace justo un año.
"Crecimos demasiado rápido, sobre todo en Latinoamérica",
admitió Robert Waterman, director externo y coautor de In search of
Excellence, un "best seller" gerencial. En lugar de Bakke, Paul
Hanrahan (hasta ayer vicepresidente ejecutivo) deberá ajustar, achicar
y abandonar mercados.
Desde 1991/2, AES intentaba sacar partido de la desordenada onda privatizadora
en el subcontinente y otros puntos de la periferia. Así, llegó
a instalar cuarenta filiales o subsidiarias. Ahora, su acción vale menos
de US$ 5, contra 70 en octubre de 2000 y 44,50 hace justo un año.
"Crecimos demasiado rápido, sobre todo en Latinoamérica",
admitió Robert Waterman, director externo y coautor de In search of
Excellence, un "best seller" gerencial. En lugar de Bakke, Paul
Hanrahan (hasta ayer vicepresidente ejecutivo) deberá ajustar, achicar
y abandonar mercados.
