Los que pueden, pagan por el cine en casa
En el mundo hay multimillonarios que no escatiman centavos a la hora de disfrutar una experiencia de excelencia de audio y video sin salir de sus casas. Para ellos, hay fabricantes que sacan equipos hogareños a precios casi obscenos.
En Beverly Hills, California, se realizó este fin de semana un gran acontecimiento para presentar lo que será la próxima generación de televisores y productos de video de Bang & Olufsen, fabricantes daneses de televisores y equipos de sonido de alto precio. El sector de mercado que cuenta con medios suficientes para comprar esa marca no tiene problemas en pagar 50 veces más de lo que cuesta un reproductor común de DVD para crear en sus hogares lo último de lo último en experiencia audiovisual hogareña.
En Estados Unidos, Bang & Olufsen vende su equipo de audio y video a través de 58 locales propios y franquiciados. El televisor más barato de la línea – el BeoVision Avant, de 30 pulgadas – cuesta US$ 8.500.
Mientras en general los televisores y reproductores de DVD se han convertido en commodities y se fabrican en China para reducir costos, algunas empresas se dedican a producir aparatos de altísima calidad y precio para un creciente segmento del mercado formado por personas que buscan la más perfecta experiencia audiovisual.
Según Hill Ablondi, analista de Parks Associates (Dallas) lo ingresos de concesionarios que venden e instalan sistemas de audio y video (son sistemas que los compradores no instalan por sí mismos) crecieron 19% en 2003.
RCA vende dos modelos de televisores con retroproyección que usan tecnología de procesamiento con luz digital. Ambos con un precio de base de US$ 6.000. Este mes, Sony comenzará sus envíos del modelo SXRD, un sistema de proyección frontal que costará US$ 30.000. Y LG Electronics ha reposicionado su compañía. Desde ahora, Zenith será la marca de introducción, pero promocionará el nombre LG como marca para conocedores. Su último modelo es un LG con pantalla de plasma de 76 pulgadas y está dirigido al mercado de los multimillonarios, con un precio acorde.
En Beverly Hills, California, se realizó este fin de semana un gran acontecimiento para presentar lo que será la próxima generación de televisores y productos de video de Bang & Olufsen, fabricantes daneses de televisores y equipos de sonido de alto precio. El sector de mercado que cuenta con medios suficientes para comprar esa marca no tiene problemas en pagar 50 veces más de lo que cuesta un reproductor común de DVD para crear en sus hogares lo último de lo último en experiencia audiovisual hogareña.
En Estados Unidos, Bang & Olufsen vende su equipo de audio y video a través de 58 locales propios y franquiciados. El televisor más barato de la línea – el BeoVision Avant, de 30 pulgadas – cuesta US$ 8.500.
Mientras en general los televisores y reproductores de DVD se han convertido en commodities y se fabrican en China para reducir costos, algunas empresas se dedican a producir aparatos de altísima calidad y precio para un creciente segmento del mercado formado por personas que buscan la más perfecta experiencia audiovisual.
Según Hill Ablondi, analista de Parks Associates (Dallas) lo ingresos de concesionarios que venden e instalan sistemas de audio y video (son sistemas que los compradores no instalan por sí mismos) crecieron 19% en 2003.
RCA vende dos modelos de televisores con retroproyección que usan tecnología de procesamiento con luz digital. Ambos con un precio de base de US$ 6.000. Este mes, Sony comenzará sus envíos del modelo SXRD, un sistema de proyección frontal que costará US$ 30.000. Y LG Electronics ha reposicionado su compañía. Desde ahora, Zenith será la marca de introducción, pero promocionará el nombre LG como marca para conocedores. Su último modelo es un LG con pantalla de plasma de 76 pulgadas y está dirigido al mercado de los multimillonarios, con un precio acorde.
