El mensaje del Nobel

La Academia Sueca la ha dado el Premio Nobel de la Paz a Barack Obama. Indignación, desconcierto, esperanza, todas cuestiones que nos desvían de descubrir la verdadera razón por la que Obama ha recibido el premio, y lo que la Locademia Sueca nos quiere decir.

13 octubre, 2009

<p><em>por Patricio Cavalli</em><br />
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Normalmente uno pensar&iacute;a que el Premio Nobel de la Paz es un galard&oacute;n que se les da a personas perseguidas, abnegadas, oprimidas, que trabajan por la paz, los derechos humanos o causas alt&iacute;simas, siempre semi escondidas para huir de gobiernos terribles.<br />
En ese caso el Nobel los ilumina, los saca de la oscuridad y en cierta forma, los protege. Pensemos sin ir muy lejos en Rigoberta Mench&uacute; o Adolfo Perez Esquivel como ejemplos. <br />
Pero no. Eso es lo que uno piensa, pero no.<br />
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El Nobel del Siglo XXI es bien Siglo XXI: medio premio medi&aacute;tico, medio payasada, cuyo nombre real deber&iacute;a ser Premio Nobel a la Esquizofrenia Europea, y cada tanto nos recuerda que fue instituido no por un abnegado y oprimido trabajador de la paz si no por un fabricante y vendedor de armas, Alfred Nobel. <br />
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En esa l&iacute;nea uno puede pensar que es l&oacute;gico que el Nobel vaya a alguien como Obama, cuyo mayor m&eacute;rito por la paz es, por ahora, no haber usado el arsenal nuclear que tiene al alcance de su dedo &iacute;ndice. <br />
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Es interesante preguntarnos si el verdadero mensaje del Rey Carl XVI Gustaf de Suecia no es &ldquo;te damos el premio muchacho para que no se te ocurra usar las armas que ten&eacute;s&rdquo;. <br />
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<p>Cosa medio il&oacute;gica teniendo en cuenta lo que ya dijimos de &ldquo;<em>being presidential</em>&rdquo; y la cantidad de guerras que han armado los dem&oacute;cratas a lo largo de la historia (m&aacute;s que los republicanos). Si <br /><br />Obama tiene que lanzar una guerra lo har&aacute; sin pensar en el Premio ni un segundo, y es m&aacute;s tal vez lo use de pisapapeles para que no se le vuelen los memos de seguridad nacional donde va a seguir ordenando despliegue de tropas, torturas, secuestros, operaciones encubiertas, misiones comando y todas esas cosas que hacen los presidentes de las grandes potencias. En unos d&iacute;as o semanas lo har&aacute; de nuevo, ver&aacute;n, para poder tratar de salir del pantano afgano. <br /><br />Y lo dijo claramente el d&iacute;a de aceptar el premio: &ldquo;Debo recordarme a m&iacute; mismo que soy el presidente y commander in chief de una naci&oacute;n en guerra&rdquo;. O sea: &ldquo;Mis amigos europeos, mil gracias por todo, pero &iquest;saben qu&eacute;?, no llegu&eacute; ac&aacute; porque me deje manipular por mensajes con doble sentido. Voy a hacer lo que me parezca asique si piensan que esto me va a marcar un camino, pueden guardarse el <em>smorgasbord</em> y los panqueques de carne de reno en el placard&rdquo;. <br />Lo que s&iacute; queda claro es que a partir de ahora, la forma de ganar un Premio Nobel de la Paz es, no trabajar por la paz, sino tener un arsenal. La Locademia Nobel le dar&aacute; a usted el premio por, simplemente, no haberlo usado. <br /><br />Hay otra pregunta obvia: &iquest;qu&eacute; demonios ha hecho Obama por la paz? Algo real, tangible, no guitarra lar&aacute; lar&aacute;, vengan los iran&iacute;es y charlemos, firmo un decreto pero Guant&aacute;namo sigue ah&iacute; y las torturas y rendiciones extraordinarias de la CIA siguen ah&iacute;, y venga el polic&iacute;a blanco que arrest&oacute; al profesor negro en Harvard a tomar cerveza a la Casa Blanca y bla bla bla.<br />&nbsp;</p>

<p>El tema es complejo, porque no me queda claro si alguien puede ir a recibir el premio y subir al podio en el Parlamento Noruego armado.<br /> Obama lo har&aacute;, no con una .45 en el cinto (es muy mersa eso), si no con el football, la valija con los c&oacute;digos nucleares que lo acompa&ntilde;a a todos lados, todo el d&iacute;a, todo el tiempo. <br /> Lo cual nos lleva a otra de las preguntas clave del asunto: &iquest;Qu&eacute; han hecho los Estados Unidos para merecer este premio? &iquest;No deber&iacute;an los suecos esperar un poco, a ver si EE.UU. repara algo del da&ntilde;o ilegal e injustificado que ha causado en Irak, por ejemplo? &iquest;No merece el pueblo de Irak el Premio Nobel de la Paz, en todo caso?<br /><br /> Orador de primera, Obama no ha hecho otra cosa que hablar. Podr&iacute;a ser entonces que el Nobel fuera ahora un premio a intenciones declamadas y no a logros reales y trabajo verdadero. El nombre real ser&iacute;a en este caso Premio Nobel a la Guitarra, por ejemplo. O Premio Nobel a la Labia.<br /> Tambi&eacute;n podr&iacute;an darle el de f&iacute;sica, por el f&iacute;sico de su mujer; o el de literatura, por &ldquo;haber escrito una p&aacute;gina en la historia del mundo&rdquo;; o el de medicina, por sanar las heridas raciales en los EE.UU.<br /> O Premio Nobel al Hemisferio Norte, en todo caso, si tenemos en cuenta que en 2007 lo gan&oacute; Al Gore, en 2008 un ex presidente de Finlandia y ahora un presidente de los EE.UU. en ejercicio. <br /> <br />Y creo que de ah&iacute; vienen las claves para desenredar este asunto. Dado que Obama no merece ni por asomo el Premio Nobel de la Paz, est&aacute; claro que factores extra&ntilde;os jugaron en su favor. <br /> El primero creo es que los suecos se equivocaron. Le iban a dar el Nobel a Lula, que viene ganando todo (el mundial, los juegos ol&iacute;mpicos&hellip;) y se confundieron de pa&iacute;s y se lo dieron a Obama. O, en segundo lugar de esta hip&oacute;tesis, fue un Premio Nobel Consuelo.</p>

<p>- &ldquo;Ya que no le dimos al tipo las olimp&iacute;adas, d&eacute;mosle algo &ndash;dijeron-. Lo que quede, algo consuelo, cualquier cosa&hellip;&rdquo;, dijo uno. <br /> – &ldquo;Yo tengo el Nobel de la Paz -dijo Su Majestad Carl XVI Gustaf masticando un bocadito de arenque-. &iquest;Sirve?&rdquo;<br /> – &ldquo;Bingo&rdquo;. <br /> Hay otra posibilidad, y creo que es la m&aacute;s factible: la crisis global. Afectados por la falta de cr&eacute;dito, de dinero y reducci&oacute;n brutal de costos, los jerarcas de la Academia Sueca no salen mucho. No tienen caso acceso a internet, no pueden comprar m&aacute;s que el <em>&Ouml;rnsk&ouml;ldsviks Allehanda </em>o el <em>Ostersunds-Posten</em> para informarse y, la verdad sea dicha, salen poco. <br /> Una salida a la bah&iacute;a de Estocolmo cada tanto, una bicicleteada en la rambla <em>N&ouml;r M&auml;laarstrand</em>, un picninc en el <em>Gal&auml;rparken</em>, una remontada de barriletes en la islita de <em>Langholmen</em>, pero no mucho m&aacute;s. <br /> De a poco, el resto del mundo se le ha hecho difuso. Los luchadores por la paz verdaderos, que no viven en Estocolmo escuchando ABBA y desayunando <em>sm&ouml;rgasbord</em>, y que est&aacute;n en lugares m&aacute;s complicados del mundo &ndash; resistiendo la opresi&oacute;n china en el Tibet, luchando contra los secuestros de la guerrilla en Colombia, escapando de las torturas en Iran, Myanmar o Sri Lanka, liberando detenidos-desaparecidos en Irak o Siria, curando heridos y visitando presos en Chechenya, refugiando a millones en Darfur, encontrando nietos en Argentina, se les hacen lejanos, demasiado lejanos y dif&iacute;ciles de conseguir para traerlos al Parlamento Noruego, donde se entrega el premio y la plata del premio. <br /> – &ldquo;Muchos de estos tipos no tienen domicilio, viven en celdas &ndash;dijo el otro d&iacute;a un miembro del Norwegian Nobel Commitee (el Nobel de la Paz es una producci&oacute;n sueco-noruega para ser enteramente justos)- y si no tienen donde vivir, menos van a tener cuenta de banco para depositarles un palo verde cuatrocientos. Eso nos crea un problema terrible con la AFIP Noruega&rdquo;. <br /> – &ldquo;Y adem&aacute;s, muchos son feos, mal vestidos y medio toscos. A Rigoberta no se le entend&iacute;a un pito lo que dec&iacute;a&rdquo;, a&ntilde;adi&oacute; otro. <br /> – &ldquo;Y nos tiran al bombo el <em>rating</em> &ndash;dijo otro Parliament&auml;t n&oacute;rdico-. Asique el a&ntilde;o que viene le damos el Nobel de la Paz a Roger Federer. Cumple las dos condiciones: es pint&oacute;n y vive en el hemisferio norte&rdquo;. <br /> A fin de cuentas, ya lo dijo el presidente de la Comisi&oacute;n Nobel que pronto trabajar&aacute; de peajista en la autopista Stockholm-Ulme: &ldquo;De 200 candidatos, elegimos al que m&aacute;s exposici&oacute;n ten&iacute;a&rdquo;. <br /> El mensaje del Nobel, lo que este Nobel nos dice es claro: en el siglo XXI, no hay que hacer si no parecer, y lo mejor que se puede ser no es un hombre o mujer de la paz si no un tipo pint&oacute;n y medi&aacute;tico. <br /> Paradoja del destino, haber dinamitado el prestigio del Nobel.</p><p>&nbsp;</p>

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