Warren Bennis, el padre del liderazgo
A sus 80 años, quien fuera biógrafo de políticos y empresarios se sienta a escribir su propia biografía. Habla de sus errores y de sus aciertos con evidente honestidad y una buena dosis de sentido del humor. Su consejo: hay que adherir simultáneamente a los símbolos de cambio y a los símbolos de tradición.
24 octubre, 2011
<p style="margin-top: 0px; margin-right: 0px; margin-bottom: 15px; margin-left: 0px; padding-top: 0px; padding-right: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; ">Si Peter Drucker fue el padre del <em style="margin-top: 0px; margin-right: 0px; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; padding-top: 0px; padding-right: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; ">management</em>, Warren Bennis merece ser llamado el padre del liderazgo. En <em style="margin-top: 0px; margin-right: 0px; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; padding-top: 0px; padding-right: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; ">Still Surprised: A Memoir of a Life in Leadership </em>(*), Bennis analiza su propia vida con la misma lente que usara durante años para analizar la conducta de políticos y líderes de empresa. Es la lente que los científicos sociales llaman rol. Por lo general los biógrafos, dice, “miran no el rol sino la psico-biografía para explicar la conducta humana” y ponen mucha atención en la familia como crisol donde se forma el carácter individual. Sin embargo, “a menudo el liderazgo es una función no de la personalidad o la conformación psicológica, sino del rol en que uno de encuentra”, explica.<br />
<br style="margin-top: 0px; margin-right: 0px; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; padding-top: 0px; padding-right: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; " />
Por lo tanto, Bennis prescinde de las trilladas historias de sus padres y de su infancia para zambullirse directamente en los 10 capítulos donde va contando su vida y lecciones de liderazgo que aprendió desempeñando diversos roles. Participó en equipos de investigación, fue presidente del club en la universidad donde estudiaba y más tarde fue mentor, maestro y padre. <br />
<br style="margin-top: 0px; margin-right: 0px; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; padding-top: 0px; padding-right: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; " />
Cuenta que su vida estuvo llena de cosas interesantes y atribuye su éxito a haber tenido la suerte de encontrar los colegas adecuados en los momentos críticos de su carrera. Su primer mentor, y tal vez el más importante, fue el gran Douglas McGregor, cuyo libro<em style="margin-top: 0px; margin-right: 0px; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; padding-top: 0px; padding-right: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; ">The Human Side of Enterprise</em> fue y sigue siendo uno de los más influyentes que se han escrito jamás sobre <em style="margin-top: 0px; margin-right: 0px; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; padding-top: 0px; padding-right: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; ">management</em>.</p>
<p style="margin-top: 0px; margin-right: 0px; margin-bottom: 15px; margin-left: 0px; padding-top: 0px; padding-right: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; "><strong style="margin-top: 0px; margin-right: 0px; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; padding-top: 0px; padding-right: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; ">Un entorno fascinante<br />
</strong><br style="margin-top: 0px; margin-right: 0px; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; padding-top: 0px; padding-right: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; " />
Gracias a la buena suerte y a la influencia de McGregor, Bennis se encontró en Cambridge, Massachussets, en los años 50 en el momento exacto en que nacía en Harvard y MIT la ciencia social moderna de la mano de economistas como Paul Samuelson, Robert Modigliani y Robert Solow; de sociólogos como David Riesman, Talcott Parsons y Robert Merton; de antropólogos como Clyde Kluckhohn y Clifford Geertz; y de psicólogos como Gordon Allport, Abraham Maslow, Erik Erikson, Kart Lewin e Erving Goffman. <br />
<br style="margin-top: 0px; margin-right: 0px; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; padding-top: 0px; padding-right: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; " />
Todos ellos fueron maestros, amigos y colegas de Bennis. Por aquel entonces, cuenta el autor, casi no había barreras entre las distintas disciplinas. Casi todos los individuos mencionados se conocían entre sí, estaban familiarizados con el trabajo de cada uno y a menudo colaboraban en los equipos de investigación. Esas experiencias llevaron a Bennis a una búsqueda permanente de “comunidad”, al deseo de pertenecer a los “buenos grupos” y de conducir organizaciones donde tanto actores como técnicos “trabajaran juntos para hacer la misma película”.<br />
<br style="margin-top: 0px; margin-right: 0px; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; padding-top: 0px; padding-right: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; " />
Para Bennis, liderazgo no es la actuación de una sola persona, y ciertamente no es una simple función de su carácter individual; por eso es que analiza el rol de los líderes en el contexto de sus organizaciones. Así, analiza críticamente su propio desempeño como vicepresidente ejecutivo de Suny Buffalo y, más adelante, como presidente de la Universidad de Cincinnati, y el grado de éxito que logró en cuanto a crear las capacidades organizativas necesarias para satisfacer los desafíos específicos que esas instituciones afrontaban en ese momento. <br />
<br style="margin-top: 0px; margin-right: 0px; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; padding-top: 0px; padding-right: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; " />
Analiza objetivamente las razones de sus éxitos y de sus fracasos. Con respecto a los últimos, cita las palabras de Alfred North Whitehead sobre la necesidad de hacer frente a los desafíos del cambio: “Todo líder, para ser efectivo (o efectiva), debe adherir simultáneamente a los símbolos de cambio y revisión y a los símbolos de tradición y estabilidad”. Y concluye el biógrafo: “No logramos dominar la cultura de Buffalo antes de intentar cambiarla”. Esa es una profunda lección que Carly Fiorina podría haber aplicado en Hewlett Packard, donde no respetó la profundidad del compromiso de los empleados con la cultura creada por los fundadores de la compañía. <br />
<br style="margin-top: 0px; margin-right: 0px; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; padding-top: 0px; padding-right: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; " />
En su libro <em style="margin-top: 0px; margin-right: 0px; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; padding-top: 0px; padding-right: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; ">On Becoming a Leader</em> (1989), Bennis mostró que uno aprende a convertirse en líder reflexionando sobre la experiencia. En las escasas 177 páginas de sus memorias, capta una vida de reflexión y lo hace con buen humor, a menudo a su propia costa.</p>
<p style="margin-top: 0px; margin-right: 0px; margin-bottom: 15px; margin-left: 0px; padding-top: 0px; padding-right: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; ">(*) Warren Bennis,<em style="margin-top: 0px; margin-right: 0px; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; padding-top: 0px; padding-right: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; "> Still Surprised: A Memoir of a Life in Leadership.</em> (Jossey-Bass, 2010)</p>