(EFE).- Las bolsas de Nueva York cerraron hoy (viernes 29) la última sesión de un año negro con una nueva y fuerte caída, que dejó al promedio del mercado electrónico Nasdaq 39% por debajo del cierre del año pasado, con lo que completó el peor año de su historia.
El promedio industrial Dow Jones, que mide la variación de las acciones de 30 grandes empresas, perdió 80,77 puntos (0,74%), hasta 10.787,99.
Con esta baja, el Dow Jones se sitúa 6,1% por debajo del cierre del 31 de diciembre de 1999.
Pero el verdadero perdedor de 2000 resultó ser el mercado electrónico Nasdaq, en el que cambian de manos las acciones de la mayor parte de las empresas de nuevas tecnologías, computación e Internet.
El indicador general de este mercado perdió hoy otros 87,26 puntos (3,41%), hasta quedar en los 2.470,50.
Este nivel está 39,3% por debajo del cierre del 31 de diciembre de 1999, con lo que el Nasdaq completa en 2000 el peor rendimiento en sus 29 años de historia.
La baja del Nasdaq en el año 2000 es también la mayor baja porcentual de un índice importante de Wall Street desde 1937, cuando los mercados se recuperaban de la Gran Depresión.
La historia del tercer índice más importante de Wall Street en 2000 no fue mejor.
El S&P500, promedio que mide la variación de las acciones de 500 empresas, perdió hoy 13,94 puntos (1,04%), para quedar el fin de 2000 en las 1.320,28 unidades, 10,1% por debajo del cierre del año 1999.
La baja en la rentabilidad del S&P durante 2000 es la más brusca caída que registra este indicador, que para muchos es la mejor medida de la salud general del mercado, desde 1981.
La única excepción entre los grandes índices de Wall Street durante este año la marcó el Nyse, promedio general del mercado tradicional, que perdió hoy 3,03 puntos (0,46%), hasta quedar en las 656,87 unidades. Pero, pese a esta baja, en el 2000 ganó 6,57 puntos (1%).
Al igual que en las sesiones recién pasadas, el volumen de negocios hoy no fue muy alto, ya que ascendió a poco más de 1.027 millones de acciones, aunque fue mayor a lo que es tradicional en la última semana de negocios del año.
Entre los títulos que cambiaron de manos 1.417 subieron, 1.543 bajaron y 363 se mantuvieron sin cambios.
Los bonos del Tesoro a 30 años bajaron de precio y su tasa, que se mueve en sentido inverso al valor, subió a 5,46%, desde 5,44% del cierre del jueves.
En la sesión de hoy, al igual que durante todo el año 2000, las bolsas fueron golpeadas por la debilidad de las grandes empresas del sector de las nuevas tecnologías.
Los analistas explican que, tras las espectaculares alzas de 1999 y de los tres primeros meses de 2000, los inversores comenzaron a vender acciones de empresas de nuevas tecnologías con una fuerza e insistencia poco común.
Los expertos explican que las causas de esta baja se encuentran en varios factores, entre ellos las altísimas valoraciones de las acciones de empresas tecnológicas, la disminución del ritmo de crecimiento económico y del consumo, y el derrumbe del modelo de muchos negocios de Internet.
Por su parte, las acciones de empresas tradicionales han gozado de un muy buen año, puesto que los inversores, asustados con la caída de las nuevas tecnologías, han apostado a las firmas de negocios poco atractivos o innovadores, como los alimentos, la energía, y los productos de consumo diario.
Las acciones de Microsoft, AT&T Procter and Ganble, Kodak, Intel, Hewlett Packard, y muchas otras, fueron las más golpeadas en el año.<´>
Mientras, títulos de empresas de energía, de productos de alimentos como Coca Cola o Philip Morris (productora, además de cigarrillos de una amplia gama de alimentos envasados), anotaron suculentas ganancias.
Los analistas explican que la mirada de los inversores ya está puesta en el año 2001, y, en particular, en la reunión de la Reserva Federal (Fed) del 31 de enero próximo.
Los analistas creen que en caso de decretarse una baja en las tasas de interés, las bolsas podrían sacudirse parte del pesimismo que reina hoy en día y comenzar a recuperarse de las bajas del año 2000, un año “negro” que se desea olvidar lo más pronto posible.
(EFE).- Las bolsas de Nueva York cerraron hoy (viernes 29) la última sesión de un año negro con una nueva y fuerte caída, que dejó al promedio del mercado electrónico Nasdaq 39% por debajo del cierre del año pasado, con lo que completó el peor año de su historia.
El promedio industrial Dow Jones, que mide la variación de las acciones de 30 grandes empresas, perdió 80,77 puntos (0,74%), hasta 10.787,99.
Con esta baja, el Dow Jones se sitúa 6,1% por debajo del cierre del 31 de diciembre de 1999.
Pero el verdadero perdedor de 2000 resultó ser el mercado electrónico Nasdaq, en el que cambian de manos las acciones de la mayor parte de las empresas de nuevas tecnologías, computación e Internet.
El indicador general de este mercado perdió hoy otros 87,26 puntos (3,41%), hasta quedar en los 2.470,50.
Este nivel está 39,3% por debajo del cierre del 31 de diciembre de 1999, con lo que el Nasdaq completa en 2000 el peor rendimiento en sus 29 años de historia.
La baja del Nasdaq en el año 2000 es también la mayor baja porcentual de un índice importante de Wall Street desde 1937, cuando los mercados se recuperaban de la Gran Depresión.
La historia del tercer índice más importante de Wall Street en 2000 no fue mejor.
El S&P500, promedio que mide la variación de las acciones de 500 empresas, perdió hoy 13,94 puntos (1,04%), para quedar el fin de 2000 en las 1.320,28 unidades, 10,1% por debajo del cierre del año 1999.
La baja en la rentabilidad del S&P durante 2000 es la más brusca caída que registra este indicador, que para muchos es la mejor medida de la salud general del mercado, desde 1981.
La única excepción entre los grandes índices de Wall Street durante este año la marcó el Nyse, promedio general del mercado tradicional, que perdió hoy 3,03 puntos (0,46%), hasta quedar en las 656,87 unidades. Pero, pese a esta baja, en el 2000 ganó 6,57 puntos (1%).
Al igual que en las sesiones recién pasadas, el volumen de negocios hoy no fue muy alto, ya que ascendió a poco más de 1.027 millones de acciones, aunque fue mayor a lo que es tradicional en la última semana de negocios del año.
Entre los títulos que cambiaron de manos 1.417 subieron, 1.543 bajaron y 363 se mantuvieron sin cambios.
Los bonos del Tesoro a 30 años bajaron de precio y su tasa, que se mueve en sentido inverso al valor, subió a 5,46%, desde 5,44% del cierre del jueves.
En la sesión de hoy, al igual que durante todo el año 2000, las bolsas fueron golpeadas por la debilidad de las grandes empresas del sector de las nuevas tecnologías.
Los analistas explican que, tras las espectaculares alzas de 1999 y de los tres primeros meses de 2000, los inversores comenzaron a vender acciones de empresas de nuevas tecnologías con una fuerza e insistencia poco común.
Los expertos explican que las causas de esta baja se encuentran en varios factores, entre ellos las altísimas valoraciones de las acciones de empresas tecnológicas, la disminución del ritmo de crecimiento económico y del consumo, y el derrumbe del modelo de muchos negocios de Internet.
Por su parte, las acciones de empresas tradicionales han gozado de un muy buen año, puesto que los inversores, asustados con la caída de las nuevas tecnologías, han apostado a las firmas de negocios poco atractivos o innovadores, como los alimentos, la energía, y los productos de consumo diario.
Las acciones de Microsoft, AT&T Procter and Ganble, Kodak, Intel, Hewlett Packard, y muchas otras, fueron las más golpeadas en el año.<´>
Mientras, títulos de empresas de energía, de productos de alimentos como Coca Cola o Philip Morris (productora, además de cigarrillos de una amplia gama de alimentos envasados), anotaron suculentas ganancias.
Los analistas explican que la mirada de los inversores ya está puesta en el año 2001, y, en particular, en la reunión de la Reserva Federal (Fed) del 31 de enero próximo.
Los analistas creen que en caso de decretarse una baja en las tasas de interés, las bolsas podrían sacudirse parte del pesimismo que reina hoy en día y comenzar a recuperarse de las bajas del año 2000, un año “negro” que se desea olvidar lo más pronto posible.