En verdad, el problema fundamental se asocia a los efectos bursátiles de una crisis doble: bienes raíces y e iliquidez crediticia. Así, la semana empezó difícil para Citigroup –el mayor conglomerado financiero norteamericano, no ya mundial-, que cedió hasta 5% y quedó entre los peores desempeños en el Dow Jones financiero y la cartera Standard&Poor’s 500.
También fueron golpeados títulos de constructoras residenciales como KB Home. A esta firma acababan de degradarla como riesgo y su caída hizo ceder hasta 4% el Dow Jones sectorial. Por otro ángulo. Las ventas de temporada ofrecen un panorama pesimista. Ello provocó retroceso en las cotizaciones de Target (segunda cadena minorista), que bajaban más de 3%. Varios analistas no cifran muchas esperanzas en los veinte días previos a la pausa de fiestas.
En ese clima, el Dow Jones 30 cedía 1,83%. El S&P 500 bajaba 2,14% y el Nasdaq compuesto perdía 2,32%. El euro se mantenía sostenido en US$ 1,486. el oro ascendía a US$ 826,50 y los crudos –influidos por versiones “a medida”- se replegaban un poco, a US$ 98,10 (WTI, Nueva York) y 95,45 (Brent, Londres).
En verdad, el problema fundamental se asocia a los efectos bursátiles de una crisis doble: bienes raíces y e iliquidez crediticia. Así, la semana empezó difícil para Citigroup –el mayor conglomerado financiero norteamericano, no ya mundial-, que cedió hasta 5% y quedó entre los peores desempeños en el Dow Jones financiero y la cartera Standard&Poor’s 500.
También fueron golpeados títulos de constructoras residenciales como KB Home. A esta firma acababan de degradarla como riesgo y su caída hizo ceder hasta 4% el Dow Jones sectorial. Por otro ángulo. Las ventas de temporada ofrecen un panorama pesimista. Ello provocó retroceso en las cotizaciones de Target (segunda cadena minorista), que bajaban más de 3%. Varios analistas no cifran muchas esperanzas en los veinte días previos a la pausa de fiestas.
En ese clima, el Dow Jones 30 cedía 1,83%. El S&P 500 bajaba 2,14% y el Nasdaq compuesto perdía 2,32%. El euro se mantenía sostenido en US$ 1,486. el oro ascendía a US$ 826,50 y los crudos –influidos por versiones “a medida”- se replegaban un poco, a US$ 98,10 (WTI, Nueva York) y 95,45 (Brent, Londres).