lunes, 2 de diciembre de 2024

SEC: examina fondos de cubertura en pos de maniobras dolosas

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La Securities & exchange commission (comision de valores) escruta fondos que especulan con derivados. Busca señales de “insider trading”, o sea uso ilegal de datos internos vía nexos entre ejecutivos, empleados y firmas cotizantes en bolsa.

Funcionarios de la SEC pidieron a los fondos de cobertura listas de clientes y personal que actúe como ejecutivos o directivos de firmas cotizantes en bolsa. También requiere nombres de familiares en esos puestos. Esto figura en una solicitud de 27 páginas a jerárquicos del sector, cuya autenticidad fue confirmada. Queda claro que la autoridad supervisora trata de obtener informaciones muy específicas –nunca exigidas hasta ahora- que revelen abusos de datos internos.

Volúmenes poco usuales de acciones y opciones cambiaron de manos antes de ciertas adquisiciones (por ejemplo TXU o Dow Jones & Co.). Esto intensifica el escrutinio de datos claves y cómo se difunden entre fondos de cobertura, bancas de inversión y firmas expertas en compras apalancadas. La oficina de inspecciones de la SEC remitió al departamento de sumarios 223 casos de transgresiones potenciales durante el último año fiscal.

La agencia neoyorquina de la comisión empezó a usar nuevos instrumentos de investigación, más amplios que los anteriores, a raíz de reclamos parlamentarios. En particular, del senador Charles Grassley (comité de banca), que censuró los pobres antecedentes de la SEC en cuanto a detectar abusos de información reservada. El actual mecanismo se centra en riesgos de “insider trading” y requiere que los asesores de inversión ejerzan controles más estrictos.

Los fondos de cobertura son en general fuentes de capital extrabursátil cuyos managers participan substancialmente de ganancias obtenidas especulando con activos, futuros y derivados. Aceptan colocaciones de gente adinerada, pero también –ahí reside un enorme peligro- de cuantiosos fondos jubilatorios que juegan con los aportes de la gente.

Funcionarios de la SEC pidieron a los fondos de cobertura listas de clientes y personal que actúe como ejecutivos o directivos de firmas cotizantes en bolsa. También requiere nombres de familiares en esos puestos. Esto figura en una solicitud de 27 páginas a jerárquicos del sector, cuya autenticidad fue confirmada. Queda claro que la autoridad supervisora trata de obtener informaciones muy específicas –nunca exigidas hasta ahora- que revelen abusos de datos internos.

Volúmenes poco usuales de acciones y opciones cambiaron de manos antes de ciertas adquisiciones (por ejemplo TXU o Dow Jones & Co.). Esto intensifica el escrutinio de datos claves y cómo se difunden entre fondos de cobertura, bancas de inversión y firmas expertas en compras apalancadas. La oficina de inspecciones de la SEC remitió al departamento de sumarios 223 casos de transgresiones potenciales durante el último año fiscal.

La agencia neoyorquina de la comisión empezó a usar nuevos instrumentos de investigación, más amplios que los anteriores, a raíz de reclamos parlamentarios. En particular, del senador Charles Grassley (comité de banca), que censuró los pobres antecedentes de la SEC en cuanto a detectar abusos de información reservada. El actual mecanismo se centra en riesgos de “insider trading” y requiere que los asesores de inversión ejerzan controles más estrictos.

Los fondos de cobertura son en general fuentes de capital extrabursátil cuyos managers participan substancialmente de ganancias obtenidas especulando con activos, futuros y derivados. Aceptan colocaciones de gente adinerada, pero también –ahí reside un enorme peligro- de cuantiosos fondos jubilatorios que juegan con los aportes de la gente.

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