Juan Antonio Niño afirmó que los bancos latinoamericanas han ganado experiencia en sistemas de prevención, lo cual ha permitido mejorar los programas de control. Así sostuvo en el seminario sobre riesgos del lavado de dinero y el financiamiento del terrorismo para el sector financiero, organizado por el Banco Central.
Sin embargo, surgen problemas asociados a interpretaciones de normas internacionales. Por ejemplo, la tendencia a penalizar el lavado de activos culposo, la concepcipon según la cual los funcionarios bancarios tienen una “posición de garante” y el lavado por omisión impropia.
Según el banquero, es importante definir el papel del sector privado y las autoridades en esta materia. “Creemos firmemente que una permanente relación con los organismos de supervisión y demás autoridades es fundamental y permitirá avances importantes en el mejoramiento de los sistemas de prevención y control”.
En un tema conexo, se abordó el programa “buddy banks” (bancos amigos), idea expuesta inicialmente por Juan Carlos Zárate, adscripto al programa contra el financiamiento del terrorismo y el delito financiuero (departamento federal de Hacienda). Consiste en el intercambio de datos, tecnología y asistencia técnica, para encarar todos los factores de riesgo.
Este programa conectaría a bancos con amplia experiencia en la lucha contra el lavado de activos, para que apoyen a las autoridades ejecutivas de otras entidades financieras. Ello mejoraría los sistemas de prevención.
Juan Antonio Niño afirmó que los bancos latinoamericanas han ganado experiencia en sistemas de prevención, lo cual ha permitido mejorar los programas de control. Así sostuvo en el seminario sobre riesgos del lavado de dinero y el financiamiento del terrorismo para el sector financiero, organizado por el Banco Central.
Sin embargo, surgen problemas asociados a interpretaciones de normas internacionales. Por ejemplo, la tendencia a penalizar el lavado de activos culposo, la concepcipon según la cual los funcionarios bancarios tienen una “posición de garante” y el lavado por omisión impropia.
Según el banquero, es importante definir el papel del sector privado y las autoridades en esta materia. “Creemos firmemente que una permanente relación con los organismos de supervisión y demás autoridades es fundamental y permitirá avances importantes en el mejoramiento de los sistemas de prevención y control”.
En un tema conexo, se abordó el programa “buddy banks” (bancos amigos), idea expuesta inicialmente por Juan Carlos Zárate, adscripto al programa contra el financiamiento del terrorismo y el delito financiuero (departamento federal de Hacienda). Consiste en el intercambio de datos, tecnología y asistencia técnica, para encarar todos los factores de riesgo.
Este programa conectaría a bancos con amplia experiencia en la lucha contra el lavado de activos, para que apoyen a las autoridades ejecutivas de otras entidades financieras. Ello mejoraría los sistemas de prevención.