Primero se despachó un cóctel de barbitúricos. Después, se metió en la bañera y se abrió las venas. Se sentía incapaz de afrontar a sus propios clientes, algo que nunca desveló al megaestafador ahora en arresto domiciliario (pendiente de una fianza por US$ 10 millones).
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<p> Magan venía operando con Madoff desde 1987. Hace tres semanas, en un cóctel, el francés sostuvo que su amigo “es el único que se mantiene a flote en estas turbulencias”. No sabía aún que el avispado especulador había esfumado más de US$ 50.000 millones, en una versión corregida y aumentada del fraude inventado por Carlo Ponzi durante los últimos años 20. </p>
<p>Intrigada por la larga ausencia de Magan, su esposa marchó al edificio de la avenida Madison, donde encontró el cadáver. No se sorprendió pues, desde mediados de diciembre, el financista tenía aspecto deplorable y bebía mucho. Director ejecutivo de Crédit Lyonnais en EE.UU., debió renunciar en 1994, implicado en el mayor escándalo bancario galo hasta Société Générale (2007), junto con Jean-Claude Trichet (hoy en el Banco Central Europeo). </p>
<p>Fundó Access con su compatriota Patrice Littaye. Entre los clientes más conocidos figura Philippe Junot, ex chofer y primer marido de Carolina de Mónaco. También atendía una horda de pretendientes a tronos balcánicos. El fondo manejaba una cartera de US$ 2.000 millones. </p>
Madoff se cobra la primera víctima, un especulador francés
Poco antes de nochebuena, la noche del martes, Thierry Magan Villehuchet se suicidó en su oficina de Nueva York. Dirigía Access Internacional, una gestora de fondos. Por culpa de Bernard Madoff, había perdido US$ 1.400 millones.