Luz verde al canje y, finalmente, acuerdos con Beijing

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Un fallo neoyorquino permite lanzar la gira de canje, que parte de Buenos Aires el viernes. Éste es otro revés para fondos buitres y el “comité global”. Entretanto, se firmaron acuerdos a mediano plazo con China.

El juez federal de circuito Thomas Griesa resolvió que no había méritos suficientes para detener el canje de deuda argentina en cese selectivo de pagos. Las demandas en ese sentido habían sido interpuestas por un fondo alemán (lo controla el financista Horst Wilhelm Urban) y un próspero “jubilado” argentino, vía un abogado experto en esas lides.

En una audiencia donde también participaba el estudio Cleary, Gottlieb, Steen & Hamilton (representante del gobierno argentino), el magistrado dispuso informar a todos los bonistas –no sólo los que dice representar el “comité global”- sobre alcances de los pleitos que se ventilan en Nueva York contra Argentina. También ordenó “activar la detección de evidencias para certificar acciones colectivas”. Dicho de otro modo, las demandas deben ser fundamentadas, no simples recursos para presionar.

Por supuesto, el fallo satisface al equipo económico y mejora el contexto para poner en marcha el canje. No obstante, observadores europeos no creen atinado iniciar la gira en Buenos Aires, una plaza pequeña y poco influyente en el plano internacional. Sea como fuere, las escalas realmente relevantes vendrán en las próximas dos semanas.

Tampoco tuvo buen eco exterior la negativa argentina a admitir como “economía de mercado” a China. Fue casi el único escollo durante la visita del presidente Hu Jintao, en buena medida porque el socio dominante del Mercosur, Brasil, había adoptado una postura opuesta.Pero, el miércoles dio marcha atrás y el jueves anunciaba ese reconocimiento (dícese que a instancias de Chile y Brasil mismo).

De cualquier manera, se subscribieron algunos convenios decisivos. Por ejemplo, uno por US$ 6.000 millones en cinco años para infraestructura habitacional, que abarca las firmas China Constructions y New World. Otro, por US$ 5.000 millones en igual lapso, asocia la empresa Enarsa y compañías chinas en exploración, cubicación y explotación de hidrocarburos en áreas marítimas.

Al respecto, llama la atención que ningún funcionario argentino haya tomado nota del hallazgo de reservas por 800 a 1.000 millones de barriles, en aguas internacionales 150 km al norte de Malvinas, por una cateadora británica. Máxime porque la noticia fue tratada en diarios de Hongkong, Guanzhou y Shanghai.

No obstante, el acuerdo quizás más trascendente en el plano social y regional sea el de US$ 8.000 millones, en diez años, para reabrir o extender ferrocarriles de pasajeros de media y larga distancia. En la tarea de reconstruir lo destruido por Álvaro C.Alsogaray y otros hace cuarenta años intervendrán China Beiya Escom International y el grupo “oficina XX” de los FFCC chinos. El paquete prevé electrificar las líneas Belgrano norte (ex FFCC del Estado), sur (ex Midland-estación Buenos Aires), San Martín (ex Buenos Aires al Pacífico), parte de la red Mitre (ex Central Argentino) y de la red Roca (ex FC Sud).

El juez federal de circuito Thomas Griesa resolvió que no había méritos suficientes para detener el canje de deuda argentina en cese selectivo de pagos. Las demandas en ese sentido habían sido interpuestas por un fondo alemán (lo controla el financista Horst Wilhelm Urban) y un próspero “jubilado” argentino, vía un abogado experto en esas lides.

En una audiencia donde también participaba el estudio Cleary, Gottlieb, Steen & Hamilton (representante del gobierno argentino), el magistrado dispuso informar a todos los bonistas –no sólo los que dice representar el “comité global”- sobre alcances de los pleitos que se ventilan en Nueva York contra Argentina. También ordenó “activar la detección de evidencias para certificar acciones colectivas”. Dicho de otro modo, las demandas deben ser fundamentadas, no simples recursos para presionar.

Por supuesto, el fallo satisface al equipo económico y mejora el contexto para poner en marcha el canje. No obstante, observadores europeos no creen atinado iniciar la gira en Buenos Aires, una plaza pequeña y poco influyente en el plano internacional. Sea como fuere, las escalas realmente relevantes vendrán en las próximas dos semanas.

Tampoco tuvo buen eco exterior la negativa argentina a admitir como “economía de mercado” a China. Fue casi el único escollo durante la visita del presidente Hu Jintao, en buena medida porque el socio dominante del Mercosur, Brasil, había adoptado una postura opuesta.Pero, el miércoles dio marcha atrás y el jueves anunciaba ese reconocimiento (dícese que a instancias de Chile y Brasil mismo).

De cualquier manera, se subscribieron algunos convenios decisivos. Por ejemplo, uno por US$ 6.000 millones en cinco años para infraestructura habitacional, que abarca las firmas China Constructions y New World. Otro, por US$ 5.000 millones en igual lapso, asocia la empresa Enarsa y compañías chinas en exploración, cubicación y explotación de hidrocarburos en áreas marítimas.

Al respecto, llama la atención que ningún funcionario argentino haya tomado nota del hallazgo de reservas por 800 a 1.000 millones de barriles, en aguas internacionales 150 km al norte de Malvinas, por una cateadora británica. Máxime porque la noticia fue tratada en diarios de Hongkong, Guanzhou y Shanghai.

No obstante, el acuerdo quizás más trascendente en el plano social y regional sea el de US$ 8.000 millones, en diez años, para reabrir o extender ferrocarriles de pasajeros de media y larga distancia. En la tarea de reconstruir lo destruido por Álvaro C.Alsogaray y otros hace cuarenta años intervendrán China Beiya Escom International y el grupo “oficina XX” de los FFCC chinos. El paquete prevé electrificar las líneas Belgrano norte (ex FFCC del Estado), sur (ex Midland-estación Buenos Aires), San Martín (ex Buenos Aires al Pacífico), parte de la red Mitre (ex Central Argentino) y de la red Roca (ex FC Sud).

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