Hasta ayer, la explotación petrolera en esa zona había disminuido 61%, o sea 1.040.000 barriles diarios, según el Servicio de Administración minera. El huracán tocará tierra el jueves, entre Luisiana y Florida, es decir lejos de Tejas. La reacción en ambas plazas de futuros –Londres, Nueva York- para excesiva, apuntan analistas exhibiendo un dato: “los mercados mundiales están bien abastecidos”, afirmaba Alí al-Naimí, ministro saudí del ramo.
Sin embargo, “esta clase de tormentas causa daños. Las plataformas están preparadas para soportar tifones, pero nunca se sabe”, replicaba un experto de Citigroup en Houston. Por ende, los crudos tejanos para entrega en octubre subieron de US$ 43,87 a 44,43 el barril (+1,28%) en Nueva York. A su vez, el Brent nórdico pasaba de US$ 41,02 a 41,68 (+1,6%).
Hasta confirmarse el alza petrolera, los principales paneles de Wall Street venían ascendiendo de 0,4 a 1%. Motivo: las ventas minoristas en agosto -excepto automotores- habían ganado 0,1%. El margen era menor que en julio (0,2%), pero significaba el cuarto mes seguido en alza. Esto alcanzó para los gurúes dijeran que el consumidor seguiría estimulando la economía, aunque el empleo no repuntase como sería necesario.
Otro dato inquietante es que las ventas de vehículos y partes cedieron 0,3% en agosto. Al mismo tiempo, se informó que el déficit había crecido en un margen sin precedentes durante el II trimestre: US$ 166.200 millones. Esto enfrió el entusiasmo bursátil y, sobre el cierre, las alzas se achicaban a 0,15% (Dow Jones industrial), 0,18% (S&P 500) y 0,3% (Nasdaq compuesto).
Hasta ayer, la explotación petrolera en esa zona había disminuido 61%, o sea 1.040.000 barriles diarios, según el Servicio de Administración minera. El huracán tocará tierra el jueves, entre Luisiana y Florida, es decir lejos de Tejas. La reacción en ambas plazas de futuros –Londres, Nueva York- para excesiva, apuntan analistas exhibiendo un dato: “los mercados mundiales están bien abastecidos”, afirmaba Alí al-Naimí, ministro saudí del ramo.
Sin embargo, “esta clase de tormentas causa daños. Las plataformas están preparadas para soportar tifones, pero nunca se sabe”, replicaba un experto de Citigroup en Houston. Por ende, los crudos tejanos para entrega en octubre subieron de US$ 43,87 a 44,43 el barril (+1,28%) en Nueva York. A su vez, el Brent nórdico pasaba de US$ 41,02 a 41,68 (+1,6%).
Hasta confirmarse el alza petrolera, los principales paneles de Wall Street venían ascendiendo de 0,4 a 1%. Motivo: las ventas minoristas en agosto -excepto automotores- habían ganado 0,1%. El margen era menor que en julio (0,2%), pero significaba el cuarto mes seguido en alza. Esto alcanzó para los gurúes dijeran que el consumidor seguiría estimulando la economía, aunque el empleo no repuntase como sería necesario.
Otro dato inquietante es que las ventas de vehículos y partes cedieron 0,3% en agosto. Al mismo tiempo, se informó que el déficit había crecido en un margen sin precedentes durante el II trimestre: US$ 166.200 millones. Esto enfrió el entusiasmo bursátil y, sobre el cierre, las alzas se achicaban a 0,15% (Dow Jones industrial), 0,18% (S&P 500) y 0,3% (Nasdaq compuesto).